Triste, apesadumbrado y cabizbajo. Así estaba el entrenador del Zamora CF, Balta, que no ha podido salvar al equipo del descenso en estas últimas tres jornadas que ha estado al frente del banquillo rojiblanco. "Sabíamos que era difícil pero no imposible, pero no pudo ser". "A mis jugadores no les puedo poner ni un solo 'pero' en compromiso y actitud", indicaba el salmantino, al tiempo que recordaba que los suyos hicieron méritos para ganar el partido y "el equipo se ha entregado. Hemos perdido con dignidad".

Así, el técnico huyó de reproches y recordó el estado en el que estaban en este momento los jugadores "llorando en el vestuario por haber descendido". Balta, no obstante, no quiso entrar a analizar el qué hubiera pasado si hubiera contado con más tiempo al frente del equipo y solo se refirió a estar últimas tres semanas en las que "he trabajado con un grupo comprometido y predispuesto" del que solo tuvo buenas palabras. Así, el entrenador aseguró que "se ha hecho más que los resultados que se han obtenido. El fútbol no ha sido justo pero el juego es así", se lamentó. De este modo, Balta insistió en que ha trabajo para intentar que "el Zamora se quedara donde se merece que es la Segunda B", aunque no quiso entrar en posibles renovaciones en esta nueva etapa en Tercera ya que "no es el momento". "Soy un entrenador profesional y voy a escuchar todo lo que se me proponga, pero ahora mismo no soy la prioridad en el Zamora CF porque hay otras cosas más importantes", concluyó mientras que iba diciendo "lo siento" a los medios de comunicación y abandonaba la sala de prensa absolutamente abatido por el descenso del equipo a Tercera División.