Los velocistas presentes en el pelotón de la Vuelta 2019 deberían tener en la segunda etapa su primera, y una de sus escasas oportunidades de lucirse en la carrera, lo que les obligará a intentar aprovecharla, aunque no estará exenta de obstáculos.

Esta segunda etapa se desarrollará íntegramente por carreteras alicantinas y llevará al pelotón desde Benidorm hasta Calpe en la que será la segunda jornada más larga de los veintiún días de competición con un total de 199,6 kilómetros.

A pesar de ser apta para los más rápidos, esta segunda etapa no resultará fácil de controlar con una primera parte del recorrido bastante sinuosa y propicia para que alguno de los intentos de aventura pueda cuajar.

En esa primera parte de la etapa, el pelotón ascenderá las dos primeras dificultades montañosas de esta 74ª edición, Confrides de segunda y Benilloba de tercera.

La clave del día estará a 24,8 kilómetros del final con la ascensión a un nuevo segunda, el alto de Puig Llorença, que debería servir, a pesar de ser corto, para descartar a un buen número de especialistas con su desnivel medio del 9,5 por ciento.

También estarán en juego los primeros segundos de bonificación, tanto en la línea de meta, con 10, 6 y 4 segundos, como en el esprint de Moraira donde se jugarán 3, 2 y 1 segundo, que podrían suponer el cambio de líder.

Hora de salida: 12.20 (horario peninsular)

Hora de llegada: 17.35 (horario peninsular)

Promedio intermedio previsto: 38 kms/hora

Esprint: Moraira (km. 168,4)

Montaña:

Km. 37,1 Puerto de Confrides (2ª): 20,4 kms al 3,6 %

Km. 54,2 Alto de Benilloba (3ª): 6,4 kms al 4,2 %

Km. 174,8 Alto de Puig Llorença (2ª): 3 kms al 9,6 %.