Sergio Rico, el portero del París Saint Germain, ingresado desde el pasado domingo en el hospital Virgen del Rocío de Sevilla tras caerse de su caballo en el Rocío y ser golpeado por los bueyes desbocados de un carromato, continúa estable y no ha habido cambios significativos en las últimas veinticuatro horas.

En todo momento al lado de su marido, Alba Silva ha vuelto a atender a los medios de comunicación apostados a las puertas del centro médico. El estado general de Sergio Rico continúa siendo grave y permanece ingresado en la UCI bajo los efectos de la sedación. El próximo lunes está previsto un nuevo parte médico.