El vídeo, dentro del coche, muestra los abusos de los cuatro miembros de La Manada a una joven inconsciente. La sentencia es así de clara: "... aprovechando dicha situación de inconsciencia todos los acusados, con ánimo libidinoso, comenzaron a realizarle diversos tocamientos de carácter sexual..." Sin su consentimiento graban como, en el asiento de atrás, la manosean y besuquean entre risas. Luego la dejaron tirada en la calle. Las imágenes las guardaban en sus móviles cuando dos meses después fueron detenidos en Pamplona. La Policía Foral las encontró, se dirigió a Pozoblanco y animó a la víctima a denunciar. La defensa siempre consideró que el video se obtuvo de forma ilícita pero ha acabado siendo la prueba determinante para el juez. Ha condenado a Escudero, Cabezuelo y Guerrero a 2 años y 10 meses; y al Prenda a 4 años y 6 meses.