Los Reyes siguen en Mallorca y hoy, lejos de las audiencias en el Palacio de Marivent y de las regatas, han visitado la Sierra de Tramuntana. El paraje que el verano pasado sufrió uno de los peores incendios que se recuerdan en la isla. También han estado con ellos sus hijas, así que la visita se ha convertido en un nuevo posado. Los técnicos han explicado a la familia real las labores que están llevando a cabo para recuperar las 2.400 hectáreas que quedadon calcinadas. Don Felipe y su familia seguirán veraneando en las islas hasta el próximo miércoles.