Un funambulista chino ha conseguido el más difícil todavía. Suspendido entre dos globos aeroestáticos, ha logrado atravesar la estrecha viga de 18 metros de largo que los unía. Lo ha hecho en poco más de 38 segundos. Y eso que ha tenido que parar a mitad de recorrido. Un tiempo que le ha permitido batir todos los récords.