La trama de compra de votos en Mojácar ofrecía, según la Guardia Civil, dinero pero también la posibilidad de un empleo público a cambio de su apoyo en las urnas. Las investigaciones desvelan que el número dos de la lista del PSOE, Francisco Bartolomé Flores y el número cinco, Cristóbal Vizcaíno proporcionaban el dinero en efectivo para comprar los votos, sobre todo a personas de origen latinoamericano en situación precaria. El precio se establecía en 100 euros. El cabeza de lista del PSOE en Mojácar apela a la presunción de inocencia de sus compañeros de candidatura, y acusa al partido popular de ser quien comete irregularidades con el voto. Acusa a los populares de utilizar el censo y los certificados digitales del ayuntamiento en su favor. El presidente de la Junta andaluza, Juan Manuel Moreno, acusa al PSOE de querer embarrar la campaña y recuerda que detenidos por fraude electoral solo hay de momento dos candidatos del PSOE. Esos dos candidatos están a la espera de declarar ente el juez.