Un incendio, aún descontrolado, ha profanado ya 1.450 hectáreas de la Ribeira Sacra lucense. Uno de los paraísos naturales mejor preservados de Galicia que se esfuma tras la acción de uno o varios pirómanos, ante la indignación de vecinos. Acorralado por unas llamas que casi lo dejan sin casa, Fernando sorprendió al pirómano en plena acción. Delincuentes que prendieron en dos focos a la vez en el ayuntamiento lucense de Ribas de Sil, en un día muy caluroso y con mucho viento para hacer el mayor daño posible.