Las víctimas de violación, de abusos, de acoso sexual, las mujeres explotadas por proxenetas, las forzadas a casarse o las amenazadas con ser sometidas a una ablación, van a tener un lugar al que dirigirse para contar su problema, informarse, asesorarse y pedir y recibir ayuda, que estará abierto todo el día y todos los días del año. Sin necesidad de denunciar ni de solicitar cita previa.