La denuncia de un ciudadano de Navarra dio la voz de alarma. Tras casi un año de investigación, la primera fase de la "Operación Caterbury" se ha saldado con 17 detenciones y otras 12 imputaciones, en 15 provincias españolas. Los miembros de la organización desarticulada intercambiaban material pedófilo a través de Internet, utilizando sistemas de encriptación para dificultar su localización. La Guardia Civil pudo encontrarlos gracias al buscador Quijote, desarrollado por una cátedra de investigación de la Universidad de Alcalá de Henares. Investigación al servicio de la seguridad. La operación Canterbury continúa abierta y no se descartan nuevas detenciones.