Más allá de su fortuna y de su verborrea incendiaria, Elon Musk es conocido por ser uno de los empresarios que más ha evangelizado sobre el uso de Bitcoin. Eso le llevó a que Tesla, la compañía de coches eléctricos que dirige, también apostase por invertir en la más popular de las criptomonedas. Sin embargo, la crisis en la que viven sumidas las divisas virtuales ha llevado al magnate a dar un volantazo y el fabricante de automóviles se ha deshecho de hasta el 75% de su criptoinversión.

A finales de junio, Tesla había convertido a dólares aproximadamente tres cuartas partes del Bitcoin que poseía, cuyo valor se ha desplomado un 47% en lo que va de año. Esa maniobra ha permitido a la compañía añadir 936 millones de efectivo a su balance, frenando así las pérdidas que estaba sufriendo a causa de la devaluación de la criptomoneda por la que habían apostado. Así se detalla en la carta que han mandado a los accionistas de Tesla sobre las ganancias del segundo trimestre.

Este movimiento ilustra las contradicciones de Musk, que durante meses ha arengado públicamente a sus seguidores sobre el potencial de las criptomonedas y que, cuando estas han caído, ha maniobrado para retirar esa apuesta para evitar sufrir más pérdidas sin avisar de ello a sus seguidores. "Puede que extraiga, pero no me deshago", dijo hace un año en una conferencia sobre Bitcoin. 'Holdear' o no retirar el dinero invertido en un activo cuando este está cayendo es un mantra repetido por parte de la comunidad cripto. Esas palabras se las ha llevado el viento.

Problemas en China

Aún así, el magnate niega que esa desinversión suponga su pérdida de confianza en Bitcoin. "Esto no debe tomarse como un veredicto sobre Bitcoin", se ha excusado. "Es sólo que estábamos preocupados por la liquidez general de la compañía dados los cierres (de plantas de automoción) en China a causa del covid". Musk también ha invertido parte de su fortuna en las criptomonedas Ether, la segunda más popular, y Dogecoin, considerada como una broma.

Fue en febrero del 2021, cuando Bitcoin vivía su primer gran pico de revalorización, que Tesla anunció que había invertido 1.500 millones de dólares en esta criptomoneda, decisión que también contribuyó a ese apogeo. Dos meses después anunció que se había vendido el 10% de esa participación. Con la decisión de ahora, el fabricante de coches eléctricos en manos de Musk ha reducido sus activos digitales a 218 millones de dólares.