Su solución es enviar un robot móvil que abre una "burbuja" de internet a su alrededor, según explicó a Efe en una entrevista telefónica Javier Rodríguez Molina, el estudiante de posgrado al que se le ocurrió la idea.

El español Rodríguez Molina forma parte de un equipo del Instituto de Telecomunicaciones y Tecnología Informática (Calit2) de la Universidad de California en San Diego que quiere transformar la manera en la que los servicios de emergencia responden a un desastre.

Actualmente algunas empresas estadounidenses ya ofrecen a bomberos y personal médico la posibilidad de crear una red de internet inalámbrica (wi-fi) en centros improvisados de control.

La policía también cuenta con pequeños vehículos teledirigidos pertrechados con cámaras y micrófonos para ver y oír en tomas de rehenes y operaciones similares.

Lo que el equipo al que pertenece Rodríguez Molina ha hecho es unir los dos conceptos.

Su sistema consta de un robot que podría ser confundido con un camión de juguete, el cual funciona como una plataforma en la que se pueden instalar todo tipo de aparatos, como sensores de radiación, un brazo mecánico para tomar muestras, una brújula digital o un receptor de GPS (sistema de posicionamiento global).

El ingenio puede ser dirigido con un teléfono normal o un ordenador con acceso a la web desde cualquier parte del mundo.

"Nadie había desarrollado un sistema que se pueda controlar por teléfono", dijo Rodríguez Molina. "Todo el mundo tiene un teléfono y es algo barato", añadió.

El robot crea una burbuja de internet de unos 200 metros de diámetro y puede trasmitir por la red vídeo, audio y datos desde los escombros de un edificio, una cueva derrumbada o en medio del caos de un atentado terrorista.

Para establecer una burbuja mayor el equipo de la Universidad de California, dirigido por Don Kimball, complementa la acción del robot con unas unidades sin ruedas que cargan en maletines.

Dentro del espacio wi-fi creado pueden acceder a internet médicos que necesitan saber a qué hospitales deben mandar a los heridos en un desastre, por ejemplo.

Pero el plan de los ingenieros y programadores es hacer la burbuja completamente móvil. "Queremos construir un grupo de robot que se comuniquen, teniendo un robot comandante", explicó Rodríguez Molina.

"Podríamos ordenarles ir a un punto determinado, crear una red y mantenerla, o si hay más gente que usa internet en un lugar, moverse hacia allí", dijo.

Otro proyecto es fabricar una avioneta teledirigida que ofrezca imágenes y otros datos a vista de pájaro.

Los científicos también pretenden instalar cadenas de oruga en su camión, para que pueda subir escaleras y superar obstáculos como aceras o piedras.

No les faltan ideas para solventar uno de los mayores problemas a los que se enfrentan las autoridades en situaciones de emergencia: la falta de información.