El nistagmus es una enfermedad que origina un movimiento constante, repetitivo e involuntario de los ojos. Esto ocasiona que cuando ocurre desde la infancia, la visión no pueda desarrollarse adecuadamente, lo cual conlleva severas pérdidas de visión en lo que se conoce como una de las causas más severas de ojo vago o ambliopía.

Es una enfermedad que debe ser abordada de forma multidisciplinar por distintos especialistas; así, inicialmente deberemos descartar por un neurólogo que no haya ninguna causa cerebral que lo origine, pues puede ser la manifestación de enfermedades neurológicas muy severas. Una vez descartada esta situación, su abordaje deberá ser tratado por el oftalmólogo pediátrico y estrabólogo, pues en ocasiones requerirá de tratamiento quirúrgico para mejorar la situación visual del paciente.

Así, con la operación del nistagmus no vamos a conseguir directamente una mejoría de la visión, pero en ocasiones nos encontramos con pacientes que el movimiento de los ojos es mantenido en todas las posiciones de la mirada, menos en alguna dirección determinada, lo cual origina que siempre dirija los ojos a esa posición para poder ver mejor al frenar su movimiento y condicione un incómodo giro de la cabeza que es lo que denominamos tortícolis.

Así, el paciente se presenta girando la cabeza para poder enfocar, lo cual limita su capacidad visual al afectar al campo de su visión y por otro lado origina problemas a nivel cervical de contracturas que en ocasiones llevan años siendo tratadas con rehabilitación sin grandes éxitos, dado que el problema originario que es el nistagmus se mantiene.

En estos casos la indicación suele ser quirúrgica, y requiere de una intervención a nivel de la musculatura de los ojos, como hacemos en los pacientes que tienen estrabismos, para cambiar esa desviación de la mirada y aliviar el tortícolis con la restitución de su campo visual, por lo cual el paciente nota una gran mejoría en su visión, aunque realmente no haya mejorado la misma, sino que lo que hemos mejorado es su posición y por tanto todos los problemas que acarreaba con su tortícolis durante años.

Mejoras tecnológicas

Hasta hace pocos años existían muy pocas técnicas para poder valorar en detalle los tipos de nistagmus, y muchas de ellas basadas en la mera observación.

Afortunadamente, estas técnicas se han desarrollado y hoy en día nos permiten registros por encima de 0,1% de desviación y nos permite analizar los movimientos de forma similar a la realidad en todas las posiciones de la mirada.

Realmente estas técnicas que son las más modernas en el campo de la estrabología, suponen un gran avance, por lo cual las consideramos necesarias para poder estudiar en detalle estas patologías.

El nistagmus es una enfermedad que si bien no es excesivamente frecuente, si que tiene una gran repercusión en cuanto a sus consecuencias, dado que en muchas ocasiones las limitaciones visuales que condiciona son severas, llegando incluso en pacientes en los que se manifiesta desde el nacimiento, a valores de ceguera legal.

Por ello, cualquier avance en el diagnostico y tratamiento de estos pacientes, supone una gran adelanto y la apertura de nuevas líneas de estudio e investigación y posibilidades para conseguir un mejor tratamiento y por tanto una mayor calidad de vida.

Las modernas técnicas de diagnostico como la Videooculografia o los simuladores prequirúrgicos en el campo del estrabismo, suponen un gran adelanto para el tratamiento de los pacientes con desviaciones oculares.

Durante anos los estrabismos se han medido mediante la simple observación con un gran sesgo subjetivo, por lo cual estas técnicas además de su elevada precisión, superior a lo que el ojo humano es capaz de registrar, nos ofrecen un registro objetivo de la desviación ocular y lo que es más una forma exacta de poder objetivar los resultados de los tratamientos.

Recientemente en los congresos más importantes de la especialidad en el ámbito internacional hemos presentado los resultados de estas técnicas que venimos desarrollando desde hace unos anos, con un gran interés por nuestros colegas de todo el mundo. El siglo XXI también ha llegado al campo del estrabismo y nistagmus y nuestros pacientes pueden beneficiarse de estas modernas tecnologías para mejorar su calidad visual.