Gran parte de la sociedad actual se muestra concienciada con la importancia de mantener un estilo de vida saludable que nos permita sentirnos bien. Para ello, la alimentación Y es que, seguir una dieta sana, variada y alejada de los productos procesados, a la vez que mantenemos un estilo de vida activo es básico para poder disfrutar plenamente de nuestro cuerpo.

Al contrario de lo que muchos creen, mantener nuestro organismo activo y realizar ejercicio físico diariamente no tiene por qué estar ligado con ir al gimnasio. Y es que, para mucha gente entrenar en estos centros resulta incómodo o no se sienten bien y no disfrutan. Incluso, en estos tiempos de coronavirus que vive el mundo, muchas personas evitan entrenar en el gimnasio por el miedo a contagiarse. Por ello, en este artículo recogemos algunos sencillos ejercicios que pueden realizar los principiantes para ponerse en forma y adelgazar.

Pero, antes de nada, cabe recalcar que, para poder aspirar a este tipo de vida, debemos firmar un pacto con nosotros mismos en el que nos comprometamos a combatir a uno de nuestros grandes enemigos: la pereza. Para enfrentarnos a este adversario suele ser de ayuda crear un planing en el que repartamos el trabajo físico que realizaremos cada día.

Acostúmbrate a caminar

Uno de los consejos básicos y más sencillos de cumplir es el de salir a andar todos los días. Son muchas las personas que disfrutan de esta actividad deportiva, ya que no hace falta estar en forma para realizarla y te permite hablar o escuchar un podcast, la radio o cualquier cosa que te entretenga. Todo ello convierte a esta actividad en algo muy divertido con lo que evadirnos del estrés.

Si con la práctica vas adquiriendo mejor forma física puedes ir subiendo progresivamente el ritmo, para forzar un poco más al cuerpo. Incluso, si te ves capaz, puedes alternar algunos tramos trotando con otros, más largos, andando. Al final, podrás acabar disfrutando del ‘running que a tanta gente ha enamorado en estos tiempos.

Subir y bajar escaleras

Subir y bajar escaleras es un gran ejercicio para fortalecer nuestras piernas, al mismo tiempo que aceleramos nuestro ritmo cardíaco y quemamos calorías. Es recomendable realizar este ejercicio en un parque al aire libre, ya que subir los peldños de un edificio puede acabar mareando por los constantes giros que nos obliga a realizar. Podemos mantener un ritmo constante o podemos realizar franjas de tiempo en las que aumentemos la intensidad.

Planchas isométricas

Uno de los mejores ejercicios para fortalecer el abdomen son las panchas isométricas Se trata de quedarse quieto con el abdomen en tensión como si fueras a hacer una flexión, pero apoyado sobre tus codos flexionados y sin moverte.

También puede realizarse este ejercicio de costado y apoyado solo sobre uno de los codos, así trabajaremos la zona lateral. Esta técnica isométrica está muy extendida en la actualidad porque no requiere de los movimientos de la columna vertebral ni de las cervicales que sí hacemos en los abdominales tradicionales.

Entrenamiento HIIT

El entrenamiento interválico de alta intensidad o entrenamiento HIIT destaca por encima de otros ejercicios, porque realizándolo de manera adecuada se pueden obtener resultados más rápido que con otro tipo de actividades. Aunque para realizar estas actividades en ocasiones se requiera de un nivel mínimo de técnica y forma física, existen rutinas para principiantes con ejercicios más sencillos con los que inciarse.

Para comenzar, te apuntamos algunos ejercicios HIIT que inciden de una manera global en nuestro cuerpo. Todos ellos nos sirven para acelerar nuestro pulso y comenzar a sudar en pocos minutos. Este tipo de entrenamiento debe realizarse de forma rápida, alcanzando niveles de alta intensidad. Estos son algunos movimientos que deberás apuntar: Salto de estrella, Escalador, Escalador doble, Burpee y Burrol.

Flexiones

Las flexiones de toda la vida son otro de los mejores ejercicios que existen para tonificar la parte superior del cuerpo a la vez que pierdes grasa. Acostado boca abajo, coloca los brazos extendidos a la misma altura de los hombros y mantén la espalda recta y las caderas alineadas. En este punto las puntas de los pies es la única parte del cuerpo, además de las manos, que toca el suelo. Baja el cuerpo doblando los brazos y vuelve a la posición inicial extendiéndolos de nuevo.

Si no tienes demasiada fuerza en los brazos puedes probar su versión más ligera: utilizando las rodillas como punto de apoyo a la vez que cruzas y mantienes levantados los pies.

Paciencia

Por último, queremos hacer hincapié en la idea de que la parte del cuerpo que más debemos entrenar es nuestro cerebro. Y es que, si nos dejamos llevar por falsas expectativas o si queremos alcanzar nuestros objetivos demasiado rápido caeremos en una trampa de la que será difícil salir.

Cambiar nuestra vida hacia un estilo más saludable será complicado si creemos que en un par de semanas observaremos grandes cambios. Por ello, tampoco es positivo hablar de triunfos ni de fracasos. Tan solo, sigue una dieta sana y realiza actividad física de forma continuada, consumiendo menos calorías que las que gastas. Así, conseguirás resultados sin poner en riesgo tu salud física ni psicológica.