Casi una de cada cuatro personas con problemas de malnutrición en el mundo vive en India, un país que con sus más de 1.300 millones de habitantes representa el 17 por ciento de la población mundial. El país ha hecho avances en la reducción de la desnutrición infantil pero en los últimos tiempos se enfrenta a un nuevo problema: una creciente obesidad entre adultos y menores.

Según el último informe de las agencias de la ONU sobre 'El estado de la seguridad alimentaria y la nutrición en el mundo 2018', en India hay 195,9 millones de personas malnutridas, incluidos 25,5 millones de niños menores de 5 años que presentan emaciación (bajo peso para su estatura) y 46,6 millones que tienen una estatura baja respecto a su edad.

La pobreza es sin duda uno de los factores clave en el estado nutricional de los indios. Aunque hace unos años la malnutrición era sobre todo una cuestión de falta de alimentos, hoy en día tiene más que ver con una "falta de conciencia alimentaria", explica a Europa Press el doctor Ranghaia, que trabaja en el hospital de Kanekal de la Fundación Vicente Ferrer (FVF), en el estado de Andhra Pradesh.

El desconocimiento sobre lo que debería ser una dieta saludable junto a la falta de recursos empuja a que "se compren alimentos de baja calidad o procesados, con dañinas consecuencias para la salud". En India, las familias con menos recursos reciben un paquete de comida subvencionada por el Gobierno mediante cartillas de racionamiento que incluye arroz, aceite y cereales.

Pese a que en los últimos 30 años la situación de la población india ha mejorado, "el arroz sigue siendo el pilar de la dieta de la mayoría de las familias", pero se trata de un alimento que "no tiene nutrientes", resalta el doctor Ranghaia, "sino que solo aporta carbohidratos y calorías, las cuales se transforman en grasa".

"Hay una ausencia de proteínas" en la dieta, lo cual "deriva en problemas de crecimiento", señala el facultativo, que explica que para quienes tienen pocos recursos tampoco es fácil "integrar las verduras dentro de su dieta de forma cotidiana, debido a su elevado precio". Por otra parte, añade, "una dieta rica en carbohidratos conlleva problemas de sobrepeso y obesidad".

Aumento de la obesidad

Esa es la otra cara de la malnutrición en India. Según el citado informe de la ONU, en el país hay 2,5 millones de niños menores de 5 años con sobrepeso y 32,8 millones de adultos, una cifra que supone un claro aumento con respecto a los 24,1 millones qu había en 2012. "La obesidad es otra de las amenazas que debemos considerar", afirma el médico.

"Se estima que uno de cada cinco indios sufre sobrepeso, condición estrechamente vinculada con el aumento de casos de diabetes", apunta el facultativo, especialista precisamente en esta enfermedad. Según precisa, en el hospital de la FVF se diagnostican cada día dos nuevos casos de diabetes, algunos de los cuales pueden derivar en "complicaciones severas".

El doctor Ranghaia lamenta que los indios estén abandonando sus costumbres alimentarias en detrimento de otras menos saludables. "Antes, comer comida rápida era algo esporádico que la gente hacía una vez al mes, como una ocasión especial, pero ahora la comen cada día, lo cual ha ido de la mano de un estilo de vida sedentario", resalta.

Mientras tanto, "cereales que se consumían tradicionalmente como el ragi son hoy vistos como una comida de abuelos o de pobres y su consumo ha caído, aunque el beneficio nutricional de este alimento es enorme", lamenta.

"Ha habido un cambio de patrón en la dieta que no ha ido acompañado de una educación adecuada", incide Ranghaia, que reconoce también que en India "las verduras cada día son más caras y de menor calidad a pesar del lento aumento de la agricultura orgánica".

Sin embargo, advierte, "la malnutrición en los primeros años de vida puede tener consecuencias catastróficas para el resto de la vida de esas personas, entre las que destacan los retrasos en el crecimiento, en el aprendizaje y en su vida adulta". De acuerdo con un informe publicado el pasado verano por el Banco Mundial, unos dos tercios de los trabajadores indios cobran un 13 por ciento menos por el retraso en su crecimiento durante su infancia.

Elevado número de casos de mujeres con anemia

Otro de los problemas ocasionados por una dieta no saludable es el elevado número de mujeres con anemia en el país. Según el estudio de las agencias de la ONU, un total de 175,6 millones de mujeres entre 15 y 49 años tienen déficit de hierro. En el estado de Andhra Pradesh, "el 68,3 por ciento de las adolescentes de entre 15 y 19 años padece anemia", lo que le convierte en el tercero con mayor índice del país, señala Ranghaia.

La anemia tiene un gran impacto en las adolescentes ya que, como explica el Fondo de la ONU para la Infancia (UNICEF), hace que estén más cansadas, lo que reduce su capacidad de memorizar y aprender, además de dificultar su capacidad de concentración. Las menores con anemia tienen más probabilidades de enfermar y dejar con ello de ir a la escuela y es más probable que obtengan peores resultados en los exámenes de matemáticas.

Ante este panorama, Ranghaia tiene claro que la clave pasa por "trabajar para mejorar la educación en materia de nutrición y alimentación y fomentar un estilo de vida saludable", además de "garantizar que todo el mundo tiene acceso a un paquete de alimentos básicos", especialmente quienes más lo necesitan.

Considera que también ayudaría el que se regulara el precio de ciertos alimentos, "especialmente verdudas y frutas de temporada, para garantizar que son accesibles para el conjunto de la población" con el fin de que las personas tengan acceso a una dieta saludable.

Desde la FVF, están trabajando precisamente para concienciar a la población. Así, segun explica el facultativo, las enfermeras en los hospitales de Kanekal y Kalyandurg dan talleres sobre alimentación y estilo de vida saludable a los nuevos pacientes de diabetes y a sus familiares. "Además, realizamos dos veces por semana visitas a pueblos para dar charlas de sensibilización", añade.

La Fundación Vicente Ferrer también lucha para "garantizar la seguridad alimentaria en el distrito de Anantapur" en el que trabaja, por una parte mediante su programa de nutrición que ofrece apoyo a los coletivos más vulnerables como menores, enfermos crónicos, embarazadas o personas mayores, y por otra apoyando a los agricultores para que disversifiquen sus cultivos con un sistema de riego por goteo que permite aprovechar mejor el agua y aumentar el número de productos plantados.