Llega la cuenta atrás para el destape. Sin darnos cuenta, en apenas un par de meses los rayos del sol calentarán más de lo normal y diremos adiós durante un largo tiempo a bufandas, abrigos y jerséis de lana para sustituirlos por prendas más ligeras como shorts o tops de lo más coloridos y vistosos. Llega el buen tiempo y la alegría de disfrutar al aire libre en parques y terrazas. Pero, ¿estás preparada para la operación bikini?

Precisamente una de las principales frustraciones en las semanas previas a los meses de calor es no haber trabajado aquellas zonas de nuestro cuerpo más complicadas y que requieren un extra de ejercicios. Para ayudarte hemos elaborado una lista de 10 consejos que tienes que seguir si quieres ganarle la batalla este verano a la 'operación bikini':

1. Visualiza el resultado. No basta con imaginarlo, tienes que verlo. Lo más importante es gustarse a uno mismo, por lo que encuentra en ti tus propios defectos para definir unos objetivos alcanzables y asumibles, sólo así conseguirás superar tu meta antes de que llegue el verano.

2. La fuerza está en tu mente. Resiste mentalmente. Un entrenamiento efectivo requiere de una dedicación constante. Los resultados son los que nos motivan para continuar ejercitándonos, pero no todo es cuestión de músculos, sino también de actitud. Normalmente durante las primeras semanas esos resultados no son tan visibles, por lo que tu fuerza de voluntad es la que te permitirá alcanzar tus logros en los entrenamientos.

3. Come más sano. Complementar la rutina de entrenamiento con una alimentación adecuada es básico para tener éxito en la 'operación bikini'. No significa dejar de comer todo aquello que te gusta y sobrevivir a base de lechuga todos los días. Haz unos simples cambios poco a poco como hornear los alimentos en vez de freírlos, llevarte la comida al trabajo en vez de comer fuera o cambiar el arroz blanco por el integral.

4. Hazte un chequeo médico. Si llevas tiempo sin practicar deporte es importante comprobar que puedes realizar determinadas rutinas de entrenamiento y ejercicios.

5. No olvides calentar. El calentamiento no sólo consiste en preparar a los músculos y articulaciones para el entrenamiento sino que también ayuda a mejorar la forma física y la técnica.

6. Emplea el propio peso del cuerpo. ¿Por qué? Porque cuando entrenas usando el propio cuerpo como resistencia, realizas los movimientos exactos que están diseñados para tu propio sistema muscular. Por una parte, se utiliza gran cantidad de energía; por otra, el efecto del entrenamiento se intensifica debido a unos niveles de actividad mejorados en estos sistemas.

7. Cambia de ritmo. Hacer un ejercicio a diferentes velocidades cambia completamente el ejercicio. Lento, moderado, rápido y máximo: te permitirán llegar más rápido a tu objetivo.

8. Haz sentadillas. Si quieres unos abdominales fuertes, los squats o sentadillas son el ejercicio secreto para lucir tableta abdominal este verano. Hacer sentadillas no solo sirve para desarrollar músculo y fortalecer las piernas. También se trata de dar a las abdominales una fuerza adicional y mejorar la fortaleza y definición de los músculos del tronco.

9. Apuesta por el running y el entrenamiento aeróbico. Correr aeróbicamente entrenará el metabolismo de tus grasas, entre otros efectos positivos. La carrera aeróbica hace que se transporte más oxígeno a los músculos, permitiendo que se genere energía aeróbica, aumentando así el número de calorías que quema el cuerpo. En resumen, correr consume energía y para poder perder peso, debes quemar más energía que la que ingieres.

10. Recupérate. Entrenar en exceso podría darte resultados no deseados. Si sometes a tus músculos a un nuevo estímulo de entrenamiento demasiado pronto, estos pueden debilitarse muchísimo. Para que la fase de recuperación sea adecuada es fundamental cuidar la alimentación: dieta rica en proteínas, vitaminas y minerales; y dormir bien. Cuanto mayor sea la calidad del sueño, mayor es la calidad de la recuperación de los músculos.