El asedio se intensificó cuando se conoció en Sao Paulo que el empresario, aficionado a los vinos y a la gastronomía, era el padre biológico de Bruni, hija de la actriz Marisa Borini y criada por el compositor Alberto Bruni Tedeschi, fallecido en 1996 y quien la reconoció como hija.

Remmert, en declaraciones publicadas por la edición digital del diario "O Estado de Sao Paulo", explicó que cuando una periodista de una revista gastronómica le preguntó sobre la foto de Carla en uno de sus restaurantes "otras personas presentes respondieron: él es su padre y yo no lo desmentí".

"Cultive 61 años de vida tranquila para que, de repente, todo se haya transformado en un infierno", aseguró Remmert, quien afirmó que sufre un "asedio desleal" de la prensa sensacionalista y que "fueron publicadas muchas mentiras".

Asimismo aseguró que nunca quiso notoriedad y que jamás alardeó al respecto, por lo que lamentó que su nombre aparezca ahora en reportajes de la prensa sensacionalista y que, además, tenga su privacidad invadida, "era lo último que quería", señaló.

Añadió que sabe que es el padre de la ahora compañera sentimental del gobernante francés desde que ella nació hace 40 años, fruto de una relación extra matrimonial de la madre de la cantante, y que el ex marido de Marisa sabía que él era el padre biológico de Carla, quien se enteró antes de morir Tedeschi.

El empresario italiano indicó también que conoce a Bruni desde que nació y que la primera vez que se vieron, después de que la madre le explicase a Carla quien era su padre biológico, el encuentro fue "natural y tranquilo", pues ella siempre lo conoció y por eso su relación "es estupenda".

Remmert indicó que su relación con Carla "no ha cambiado" y que él no se entromete en la vida privada de sus hijas porque lo que desea es que "sean felices, sea con quien sea".

Además de Bruni, el empresario italiano tiene otra hija biológica y dos hijastras brasileñas.

Por último, aseguró que el acoso de la prensa ha hecho que tenga que cambiar su número de teléfono y que los periodistas han llegado a acosar también a su actual mujer y su suegra, "una señora de 84 años con problemas de salud".