Él quería ir al Reina Sofía. Era su única petición en este día que pasaba en Madrid. El problema es que tenía miedo de que los fans lo asediaran. No sabía que en España, más allá de los jóvenes interesados en la cultura urbana y de los no tan jóvenes que siguen los vaivenes de la moda, nadie lo conoce. Eso sí, los que saben quién es Virgil Abloh, no solo lo saben, sino que también lo idolatran. En Estados Unidos es otro cantar. Su trascendencia se la ha dado el placer más culpable y viral de los últimos tiempos: la familia Kardashian. Virgil es algo así como el mejor amigo de Kanye West y, en términos mediáticos, eso es mucho decir.