La cocina es una de las partes de la casa que más se ensucia. Evidentemente tiene su lógica que pase. Es donde cocinas y (en no pocas ocasiones) es donde comes, desayunas y cenas. Pero si hay una zona de la cocina que supone todo un quebradero de cabeza para las amas de casa y que es más que difícil de limpiar esa es, sobre cualquier otra zona, la del fregadero.

Normalmente según van pasando los años van apareciendo pequeñas manchas que te afanas en quitar pero no se van con ningún producto. ¿La razón? Los fregaderos están hechos de un material que con el tiempo se va desgastando. Son manchas difíciles o casi imposibles de quitar pero hay soluciones.

Solución

Los expertos en limpieza aseguran que utilizando una pasta de limpieza que se vende bajo el nombre comercial de "piedra de limpieza" (los hay de todos tipos y marcas incluso de marcas blancas de algunos supermercados), se pueden conseguir resultados más que óptimos. Basta con echar el producto, dejar reposar y luego quitarlo con un poco de agua. "Los resultados son sorprendentes", aseguran quienes lo han probado matizando que, no obstante, las manchas del paso del tiempo no se pueden llegar a quitar del todo. La vejez es imposible de disimular también en los objetos de nuestro hogar (más incluso que en las personas).