La patata es uno de los alimentos más versátiles y saludables que existe. Guisadas, cocidas fritas... en cualquiera de sus formas siempre obtenemos un resultado exquisito. Pero es que además, este tubérculo tiene algunas propiedades asombrosas que nos ayudarán a tener limpia nuestra casa, hacer desaparecer las manchas, recuperar el brillo de los zapatos...

A pesar de que hoy en día tenemos todo tipo de productos específicos para cada necesidad, recurrir a la patata puede ser una solución fácil, económica, óptima y ecológica. Descubre los múltiples trucos que te ofrece la patata y conviértela en tu aliada del hogar.

Sacar brillo a los zapatos

El cuero pierde brillo con el uso diario y el paso del tiempo. Pero recuperar su tono inicial puede hacerse de forma sencilla con una patata. Sólo debes cortarla en mitades y frotarla por toda la superficie del zapato. Tras embadurnarlas bien, deja que la sustancia penetre en el cuero durante cinco minutos. A continuación, sólo tienes que coger un paño suave y seco y pasarlo por encima de tu calzado hasta que vuelva a brillar.

Saca brillo a tu cubertería

Con el paso del tiempo la cubertería de plata se vuelve más oscura y ya no luce de la misma manera al ponerla en la mesa. Para recuperar su resplandor un par de patatas pueden ayudarnos en nuestro cometido.

Córtalas y ponlas a hervir. Cuando estén blandas, retíralas del fuego y sácalas del recipiente ya que sólo necesitarás el agua. Mete dentro del cazo la cubertería que ha perdido el lustro y déjala allí una hora. Saca los cubiertos y usa un cepillo suave para limpiarlos. Cuando acabes, pasa las cucharas, tenedores y cuchillos por agua fría y sécalos con un papel de cocina.

Ventanas y espejos ultralimpios

Si te disgusta el olor que dejan los productos químicos o el limpiacristales, la patata se presenta como el substituto perfecto para lograr unas ventanas ultralimpias. Sólo tienes que frotar la mitad de una patata sobre los cristales o espejos y posteriormente limpiar con un paño seco hasta que brillen. ¡Así de fácil!

Limpia el rallador de cocina

Una de las tareas que más pereza dan en la cocina es limpiar los restos del rallador. Se hace difícil y doloroso. Para liquidar los restos de alimentos, ralla una patata ya que arrastrará todas las sobras del rallador.Desempaña tus gafas

Si utilizas gafas sabrás lo molesto que es cuando se empañan al abrir el horno encendido, al tomar una taza de té caliente o al entrar en una habitación cálida en invierno. Para evitar este tipo de situaciones sólo tienes que cortar una patata por la mitad, frotar los cristales de tus gafas y limpiarlos a continuación con un paño suave y seco.

Baldosas cerámicas relucientes

Si quieres que tu suelo o las baldosas del baño brillen como el primer día, utiliza el agua de cocción de las patatas para frotarlos con un cepillo de cerdas. Luego deberás aclarar la parte limpiad con la fregona o un paño y agua limpia.

Horno limpísimo

Guarda las peladuras de unas cuantas patatas y utilízalas para eliminar el hollín pegado en las paredes del horno. Deposítalas en la bandeja y enciende el horno. El vapor que emanan las pieles de patatas ayuda a desincrustar los restos de alimentos que quedan pegados en el electrodoméstico.

A continuación, sólo debes pasar un trapo húmedo por las paredes del horno y lograrás un resultado perfecto.

Sellos de patata

Si buscas pasar un rato divertido y creativo con los pequeños de la casa coge algunas patatas y córtalas por la mitad. Sólo necesitas un cuchillo para crear la forma que quieras que tenga el sello y pintura.

Estas impresiones puedes aplicarla en hojas de papel, cartas personalizadas, pero también en ropa, sábanas, bolsos... ¡Deja que vuele tu imaginación!

Recupera ollas y cacerolas quemadas

Quita las manchas imposibles

¡Horror! Una copa de vino se derrama en la alfombra; una taza de café mancha una blusa blanca o el tomate de los macarrones salpica el mantel de tela. Tranquilos, la fécula de patata puede ayudarnos a hacer desaparecer las manchas.

Ralla una patata cruda en un recipiente con 0,5 litros de agua. Luego, retira la pasta y agrega otros 0,5 litros de agua y espera de 10 a 15 minutos. Para tratar la mancha con este jugo de patata, empapa bien una esponja y frota el tejido manchado. Luego lava con agua fría.

Si se te ha pegado la comida en el fondo de la olla y quieres eliminar los restos negros del recipiente, utiliza una patata cruda partida por la mitad y frota. Lava, después, con agua tibia la cacerola y finalmente, sécalo con un paño suave.

Estos pequeños trucos caseros con patatas te ayudarán a sacarle brillo a tu hogar de forma natural y respetuosa con el medio ambiente sin la necesidad de recurrir a productos químicos o a fuertes olores.