En ocasiones, nuestra mesa resulta sosa. Ese mantel hace que parezca poca cosa y sin ningún adorno. Pero hoy, estás de suerte. Te vamos a dar unos trucos para hacer un centro de mesa que haga de tu mesa un lugar digno de una boda.

En toda comida que se precie, unas flores decorando la mesa nunca están de más. Si decidimos decorarla con naturaleza no es nada difícil. El primer paso consiste en comprar un jarrón transparente o una botella de vidrio.

Después, échale agua. Por último, compra unas flores bonitas en una floristería y colócalas en el jarrón.

Dará un toque de color a la mesa y aportará alegría a cualquier comida, ya sea con familia o con amigos.