Hay muchos arquitectos que se mueven por la originalidad y buscan grandes desafíos. Maestros de la arquitectura que se atreven, incluso, a desafiar las leyes de la gravedad con sus construcciones.

Dando un paseo alrededor del mundo encontramos espectaculares construcciones que resulta imposible comprender cómo se tienen en pie. Se trata de edificios que desafían la gravedad luciendo estructuras al aire. La arquitectura ofrece numerosas posibilidades para levantar este tipo de obras que no dejan indiferente a nadie.

Suspendidas de montañas, sujetadas por grandes claves, salientes de edificios, imponentes cúpulas con bases invisibles o construcciones elevadas sin apenas sujeción son algunas de las obras de arte que nos deja la arquitectura.

Lo que buscan los arquitectos que hay detrás de estas construcciones es indagar en materiales y terrenos con y sobre los que construir y cómo hacerlo. Buscando las mejores técnicas y combinando todo tipo de recursos se consiguen construcciones que dejan sin aire a muchos.

Arquitectos que dan su nombre a construcciones como estas y que buscan hacerse un hueco en la historia de esta disciplina por el impacto que sus obras generan. Se trata, en muchos casos, de edificios públicos que acogen museos o sedes de organismos. Pero también, de edificios de viviendas en los que sus propietarios se convierten en auténticos privilegiados por poder vivir en una construcción de estas características.