Una edificación a modo de prisma, con una gran cubierta metálica que unifica la parte nueva y la histórica incorporando una importante claraboya móvil en la zona central que ilumina y ventila la calle interior o atrio es la solución final para esta obra de gran volumen en Palma de Mallorca. La gran superficie de esta cubierta metálica recubierta de chapa de aluminio n permite esconder el sistema de placas foto- voltaicas que este edificio precisa.

Toda la zona nueva va acristalada y recubierta de lamas horizontales de vidrio con chapa coloreada incorporada y solo la parte histórica se mantiene en piedra. Como se ha dicho el gran alero cubre la totalidad del solar unificado y es protagonista de la obra hoy les mostramos. Una obra que poco a poco va convirtiéndose en emblemática puesto que su situación, en el primer pasaje del Moll Vell del Puerto de Palma de Mallorca, o lo que es lo mismo, es prácticamente una puerta de entrada a la ciudad, enfrentada al mar, a la Seo y al palacio real de La Almudaina. Una situación privilegiada sin duda, entre el camino de la Escollera y el propio Moll Vell. Se trata de un edificio de oficinas que alberga una institución importante en la isla, la Autoridad Portuaria, lo que da al edificio un aspecto de representación que no debe ser obviado. Además, esta la historia, puesto que el citado proyecto se desarrollo en la manzana ocupada por las antiguas oficinas y almacenes de la Transmediterránea, tan emblemáticas durante décadas.

El promotor, la misma Autoridad Portuaria de Baleares encargó la redacción del proyecto básico a Arquitectos García Ruiz y la redacción del proyecto ejecutivo a Idom Ingeniería y Sistemas para una construcción que ocupa 8.911,22 m2. Casi nada. Por todos estos motivos y los aspectos formales o de diseño, definidos por normativa el número de plantas y resto de parámetros urbanísticos, siendo el volumen a construir relativamente bajo y amplio, con un programa muy abierto y de gran cantidad de espacios que puedan cerrarse estando el solar despiezado con todas sus fachadas con vis- tas muy cambiantes en cada una de ellas conducían a adoptar una solución de despachos y zonas de trabajo perimetrales, y zonas comunitarias en un gran átomo central.

Por otra parte las edificaciones existentes de la antigua "Transmediterránea" que básicamente consistían en una zona de oficinas en el norte, con un edificio de dos plantas y el resto garajes y almacenes, estos últimos sin ningún tipo de interés histórico y en un estado de conservación ruinoso se optó por "conservar" y "potenciar" la zona norte de dicha edificación y a modo de "puerta" de acceso incorporarla al edificio a proyectar. Así pues, como elementos definitorios del programa formal de Arquitectos García-Ruiz estaba la Conservación del edificio de la "Transmediterránea" en la zona norte, a modo de acceso principal de este nuevo edificio de oficinas.

Edificio con locales de trabajo perimetrales zonas comunitarias en la zona interior iluminadas a través de un atrio central. Situar los accesos en la fachada norte como se ha dicho, y en la opuesta, los accesos de aparcamiento y personal en calles laterales. Los núcleos de comunicación vertical se sitúan junto al atrio y conectados al corredor que circunvala dicho espacio. Las orientaciones de las zonas de trabajo vienen determinadas por las fachada donde se ubiquen, por consiguiente al ser muy distintas entre sí, se deberán proteger los distintos niveles lumínicos. Con estas premisas se ha desarrollado el presente proyecto.

Conservación de edificio histórico y accesos

Los únicos elementos desde un punto de vista histórico, aunque no patrimonial, que ya formaban parte de la memoria del lugar, están en la zona principal del antiguo edificio de la "Transmediterránea", con dos plantas de altura. Esta construida en piedra, es una construcción historicista realizada a primera mitad del siglo pasado, y más por su carácter simbólico que patrimonial, se decidió incorporarla al proyecto. Únicamente se interfirió ampliando hasta nivel del suelo los huecos de fachada. En la zona oeste, en el angular, se creó un patio, y se proyectó una cubierta en voladizo a modo de alero, que conecta visualmente esta antigua edificación con la nueva. En el proyecto inicial se resol- vía con un alero de mayor sutileza suprimiendo el pesado alero actual.

Zonas de trabajo perimetrales

La excepcional situación, con amplias vistas a la Catedral, el Parque del Mar, La Lonja, el Pa seo Sagrera, la zona de pescadores y la bahía de Palma, en las orientaciones Este, Norte, Sur y Oeste respectivamente, permitieron una distribución de zonas de trabajo perimetrales, aprovechando estos condicionantes de luz y vistas.

Entre estos espacios de trabajo perimetrales exteriores y la calle interior que cruza a modo de atrio se situaron las zonas comunes, accesos y archivos.

El Paseo de circunvalación a modo de anillo de acceso permite conectar hacia el extremo con los despachos y en el interior estas zonas comunitarias y núcleos de comunicación. El carácter de acceso principal que se logró manteniendo la antigua edificación. Por otra parte esta calle que se crea en el interior, nos conduce hasta la zona sur donde situamos otra puerta. No debemos olvidar que es en esta zona donde existen los aparcamientos públicos que posiblemente utilicen los usuarios del edificio.

En la calle lateral de la zona oeste, situamos la rampa del aparcamiento y almacenes. Esta calle es la de menos tráfico y por consiguiente la que menos problemas pueda generar en este aparcamiento. Junto a esta rampa situamos un acceso de personal.

Las instalaciones planteadas para el edificio de oficinas permiten el máximo aprovechamiento de los recursos naturales y la máxima eficiencia energética apostando clara- mente por soluciones innovadoras y medio ambientalmente sostenibles.

La búsqueda del ahorro energético y la mejora del comportamiento térmico del edificio ha sido una prioridad que se ha mantenido a lo largo del desarrollo del proyecto. Esto permite obtener instalaciones más eficaces y sostenibles, que han ido evolucionando junto con el diseño arquitectónico hasta la consecución de un edificio con un elevado rendimiento medioambiental.