Así fue la juventud del Papa Francisco: portero de discoteca y fanático del fútbol

Antes de la fe, la vida: el joven que amó, trabajó y soñó

El Papa Francisco hace un gesto de aprobación con el pulgar mientras dirige la misa de Pascua en la Plaza de San Pedro en el Vaticano el 20 de abril de 2014.

El Papa Francisco hace un gesto de aprobación con el pulgar mientras dirige la misa de Pascua en la Plaza de San Pedro en el Vaticano el 20 de abril de 2014. / TONY GENTILE / Reuters

Jorge Segura

Antes de vestir de blanco y guiar a millones de fieles, el Papa Francisco llevó una vida común, llena de experiencias alejadas de los altares. Así lo revela su biografía Vida, publicada en marzo de 2024, donde el propio pontífice repasa su juventud marcada por el trabajo duro, el amor y el fútbol.

El obispo de Zamora, Fernando Valera, con el papa Francisco en 2022.

El obispo de Zamora, Fernando Valera, con el papa Francisco en 2022. / Archivo

Un flechazo en plena juventud

En sus memorias, Francisco relata que durante su formación en el seminario vivió un episodio que casi cambia su camino: un flechazo por una joven argentina. El encuentro tuvo lugar durante una boda familiar. "Durante el seminario tuve un pequeño flechazo: es normal, de lo contrario no seríamos seres humanos", admite en el libro.

La joven, a quien describe como "hermosa e inteligente", dejó una profunda huella en el entonces seminarista. Durante varios días, su imagen invadió sus pensamientos, dificultándole incluso la oración. Finalmente, tras una intensa lucha interior, "Dios venció", señala Francisco.

Esta no fue la única historia sentimental del joven Francisco. En su biografía también menciona una relación anterior con una chica vinculada al mundo del cine, quien posteriormente se casaría y formaría una familia.

De los laboratorios a las noches de discotecas

Lejos de los templos y las sotanas, la vida temprana de Jorge Bergoglio estuvo marcada por la necesidad de trabajar para apoyar a su familia de origen humilde en Buenos Aires.

Se licenció en Química, trabajó en un laboratorio, ejerció como profesor de literatura y filosofía y en un giro poco conocido de su biografía, también fue portero de discoteca. Así lo confesó el propio pontífice durante una visita a la parroquia San Cirilo Alejandrino, dejando a muchos fieles sorprendidos por su sinceridad y humildad.

La pasión eterna: San Lorenzo de Almagro

Amante declarado del fútbol, Francisco nunca ocultó su afición por San Lorenzo de Almagro, uno de los clubes más populares de Argentina. Incluso como papa, no dudó en aparecer en público con bufandas y símbolos del equipo, combinándolos sin complejos con su atuendo pontificio.

Este vínculo con el deporte y la cultura popular reforzó su imagen de líder cercano y accesible, características que han definido su pontificado desde el primer momento.

Tracking Pixel Contents