“No ha sido un ciberataque y se puede repetir”, este experto en el sector energético lo tiene claro

España va recuperando la normalidad tras el caos provocado por el apagón de ayer. Llega el momento de analizar las consecuencias y, sobre todo, las causas. Sobre ello habló en el programa de La Sexta ‘Al Rojo Vivo’ el experto en el sector energético Carlos Cagigal. Éste ha descartado por completo que haya sido un ciberataque.

El CNI detecta que el apagón podría ser consecuencia de un ciberataque

De hecho, aseguró que llevaban tiempo avisando de que esto podría suceder y que se debe a que la gran generación de energías renovables que hay en España, no está siendo acompañada de la creación de las infraestructuras necesarias. “Estamos muriendo de éxito”, comentó Cagigal. “El sistema no está preparado para este aumento tremendo de las renovables”. 

Por ello, el experto ha reiterado que perfectamente se podría repetir: "No es un caso aislado. Hay que preparar a la población, porque esto va a repetirse en los próximos meses", alertó.

"En las cajas negras se va a ver una saturación de red por sobresaturación eléctrica", indicó el consultor, que aclara que este fenómeno "es como cuando tienes un pico de consumo en tu vivienda y saltan los plomos".

El apagón fue la consecuencia no el origen

Otros expertos, como los del comparador Selectra, indican que “la caída de las tecnologías fue una consecuencia, no el origen del problema. Ahora el enfoque se encuentra en saber qué es lo que provocó que la producción se desplomara. Las desconexiones automáticas a nivel general, indican que algo ocurrió en el sistema a nivel global, no por daños físicos o infraestructurales en una zona concreta.

Aunque existen servicios de ajuste para estabilizar el sistema, están diseñados para cubrir variaciones más pequeñas que la de ayer. Se podían cubrir 1,2, pero la caída real fue de 15 gigavatios, una diferencia imposible de asumir en tiempo real.

Respecto a las placas solares, sólo quienes disponen de baterías y pueden encender el modo isla pudieron mantener el suministro. En instalaciones normales, al estar conectadas a la red general, la desconexión fue inevitable.

En teoría, el sistema debería limitar este tipo de colapsos y evitar que afecten a toda la península. Sorprende negativamente lo que se tardó en restablecer el suministro, especialmente teniendo disponibles ciclos combinados de gas y un gran volumen de agua embalsada, recursos que permiten restablecer el suministro de forma mucho más rápida que tecnologías como la nuclear, que requieren unas seis horas para entrar en servicio.