David Refoyo comparte "Redención" con los lectores de Toro

El escritor zamorano recuerda en su poemario la historia de su amigo Jero y su trágica muerte en un accidente

Pilar Antón y David Refoyo, en la presentación del libro en la Biblioteca de Toro. | M. J. C.

Pilar Antón y David Refoyo, en la presentación del libro en la Biblioteca de Toro. | M. J. C. / M. J. C.

El escritor zamorano, David Refoyo, ha presentado en la Biblioteca de Toro su último libro, “Redención”, publicado hace apenas dos meses. Reconoció el autor que escribir el poemario dedicado a su amigo Jero, fallecido en un accidente de tráfico en 2001, le ha provocado un “sentimiento encontrado”, porque tenía la necesidad de contar una historia vinculada a recuerdos que eran “algo demasiado íntimo” como para compartirlos con los lectores.

No obstante, precisó que, con “Redención”, ha pretendido que las personas que lean el libro conozcan a su amigo y “hacer literatura a partir de un suceso trágico”.

De hecho, en las páginas del poemario, Refoyo cuenta “lo que pasó y lo que quiero pensar que pasó”, aunque también formula las preguntas que quedaron en el aire para intentar encajar una muerte inesperada.

El autor explicó que el libro lo escribió en 2017, poco tiempo después del 18 aniversario de la muerte de su amigo. En el proceso de corrección, por el tiempo transcurrido, se percató de que "han pasado muchas cosas", como cumplir 40 años o ser padre, por lo que la perspectiva de su obra "ha cambiado".

No obstante, reconoció que "Redención" no es solo un poemario en el que recuerda un suceso trágico que marcó su vida, ya que "también habla de los muertos de cada uno de los lectores".

La poeta, Pilar Antón, acompañó a Refoyo en la presentación del libro en Toro, destacó que "Redención" es un poemario que se lee con fluidez, pero invitó a los lectores a releerlo para descubrir "el interesante trabajo literario realizado por el escritor".

Además, Antón alabó la constante "búsqueda de herramientas" por parte del escritor para que la obra no se limite a un "mero recordatorio sentimental o un llanto de plañideras, ya que no hay una aceptación en sus versos".