Una inspección y la actualización del padrón del Impuesto de Actividades Económicas (IAE) ha propiciado que el Ayuntamiento de Toro haya incrementado la recaudación por el pago del tributo hasta los 789.000 euros, cuando en el presupuesto de 2022 había previsto ingresar 315.000 euros. Así lo desveló la concejala de Economía, Ángeles Medina, en el pleno ordinario, en el que fue aprobada la nueva ordenanza fiscal reguladora del IAE, que sustituye a una anterior del 2006.
Destacó Medina que, en el presupuesto en vigor, el Ayuntamiento había previsto recaudar con el pago del IAE un total de 315.000 euros. Sin embargo, una inspección, promovida para constatar una posible desactualización de datos y el impago del tributo por parte de algunas empresas, ha propiciado que el Ayuntamiento haya recaudado más de 572.000 euros, que sumados a los más 216.000 ingresados por cuotas, suman 789.000 euros, cantidad muy superior a los 315.000 previstos para el 2022.
En el debate sobre la ordenanza, el equipo de Gobierno rechazó tres enmiendas presentadas por el PP y que fueron defendidas por su portavoz, Alejandro González. En la primera, el grupo popular proponía aplicar tres bonificaciones, del 50, el 75 y el 95% en función de los puestos de trabajo creados por las empresas, enmienda que fue rechazada por el Gobierno local al entender que la bonificación a aplicar, según la Ley de Haciendas Locales, no puede rebasar el 50%.
La segunda enmienda del PP proponía aplicar una bonificación del 50% para sujetos pasivos que tengan una renta o un rendimiento neto negativo y, en la tercera planteaba una reducción de hasta el 40% para aquellas empresas que apuesten por instalaciones de energías renovables para el autoconsumo.
Beneficio a grandes empresas
Ambas enmiendas fueron rechazadas por el equipo de Gobierno tras valorar que las medidas propuestas por el PP tan solo beneficiarían a las grandes empresas.
Por otra parte, la nueva ordenanza también incluye una modificación de las tarifas que, en la anterior, eran del 0,5% para las empresas asentadas en los polígonos norte y este, y del 1% para el resto de industrias. En la nueva normativa se beneficiarán del coeficiente del 0,5% las empresas que desarrollan su actividad en otros puntos de la ciudad como la carretera de Pozoantiguo, la N-122, el camino Ruales o la carretera de la Estación
Ley de Memoria Democrática
Una moción de urgencia generó tensión en el pleno y el cruce de acusaciones entre el equipo de Gobierno y el PP. El alcalde, Tomás del Bien, defendió la moción y aludió a la reciente aprobación de la Ley de Memoria Democrática que, entre otras disposiciones, contempla declarar el 31 de octubre como Día de recuerdo y homenaje a todas las víctimas.
Además, aseguró que la conmemoración del 31 de octubre contribuye “al deber de memoria para que las violaciones de derechos que se produjeron durante el golpe de Estado del 18 de julio de 1936, la Guerra y la Dictadura no puedan volver a repetirse”. El equipo de Gobierno hizo valer su mayoría para que el Ayuntamiento se adhiera a la conmemoración anual del 31 de octubre y para organizar los actos que estime oportunos para honrar a las víctimas.
El portavoz del PP recriminó a los socialistas que con la “que está cayendo en España” con los precios de la luz, o el gasoil disparados o la pérdida de poder adquisitivo, “lo más urgente que traen al pleno es este tipo de mociones”. En respuesta, el alcalde recordó a González que una de las concejalas del PSOE “sacó a su abuelo de una cuneta”.
Tras el pleno, el concejal no adscrito, Javier Gómez, calificó de “vergonzoso” el cruce de acusaciones “por un tema recurrido que no corresponde a la política municipal”. En este sentido, recordó que "el mandato de los toresanos" es que los concejales "velemos por sus intereses" porque con debates como el generado por la Ley de Memoria Democrática "solo se consiguen faltas de respeto" y generar tensión.
