El Arco del Reloj es un emblema del patrimonio toresano, pero también marca el ritmo de vida de la ciudad y muchos vecinos se guían por el toque de las horas del reloj incrustado en uno de los cuerpos de la imponente torre.
En los últimos días, una avería provocada por una tormenta ha privado a toresanos y visitantes de escuchar el tradicional toque de las horas.
Tras comprobar que la tormenta había dañado el reloj, el Ayuntamiento ha procedido a la reparación del mecanismo, que ha requerido un gasto de unos 1.500 euros, trabajos que han sido ejecutados por una empresa de la ciudad, aunque una de las piezas ha tenido que ser trasladada a Valladolid.
La reparación que ha llevado a cabo la empresa toresana por encargo del Ayuntamiento se ha centrado en el cambio del martillo que marca las horas, tras constatar su deficiente funcionamiento.
Del mismo modo, se ha llevado a cabo un ajuste del martillo de los “cuartos”, y se ha cambiado la tornillería, porque presentaba un importante desgaste por su continuado uso.
La revisión de la maquinaría del reloj del monumento también ha servido para comprobar que los contractores estaban averiados, por lo que se ha procedido a su sustitución.
En el marco de la intervención también se ha llevado a cabo el ajuste de las agujas del reloj en ambas caras, con el objetivo de garantizar su correcto funcionamiento.
