El reciente reconocimiento de Toro como “Pueblo Mágico 2022” ha servido para constatar el potencial turístico de una ciudad que, durante el puente festivo ha abierto de par en par sus puertas para recibir a los numerosos visitantes que la han elegido como destino.
El trabajo desarrollado en los últimos años para posicionar a Toro como un referente turístico empieza a dar los frutos esperados y cada vez son más los visitantes que, en pareja, en familia o en grupo, se acercan a la ciudad para descubrir sus atractivos.
“Toro infinito” es el nuevo lema elegido por el Ayuntamiento para promocionar una ciudad que atesora un valioso patrimonio histórico artístico, que se mantiene como el principal reclamo para atraer visitantes, pero que se complementa con otros recursos que permiten al turista disfrutar de una experiencia completa aderezada con vino, gastronomía o eventos culturales.
La consolidación de Toro como destino turístico ha quedado patente durante el puente festivo de diciembre ya que, como reconocían ayer profesionales del sector, la ciudad ha registrado una mayor afluencia de visitantes que en otras épocas del año tan importantes como Semana Santa.
Buena prueba de ello son las visitas guiadas que se han celebrado en la ciudad con aforo completo y que llegaron a coincidir en monumentos como la Colegiata, llenando sus naves y capillas de turistas ávidos por descubrir la historia del principal monumento de la ciudad.
Uno de los recorridos guiados clausuró el programa “Déjate llevar por Toro” organizado por el Patronato de Turismo de la Diputación, que también completó el límite máximo de participantes, un total de 50.
Visitantes procedentes de distintos puntos de España como Málaga, Almería, Albacete, Valladolid, Murcia, Salamanca, Navarra o Alicante disfrutaron de la visita guiada y gratuita, durante la que pudieron admirar la Colegiata, las iglesias de San Sebastián de los Caballeros y San Lorenzo el Real, además de la histórica plaza de toros.
La masiva afluencia de visitantes en el puente también tiene una repercusión positiva en otros sectores como el hotelero, que en los últimos días ha rozado la plena ocupación, o el comercio tradicional, ya que son muchos los turistas que aprovechan su estancia en Toro para adquirir vino de las bodegas de la Denominación de Origen, queso, embutidos o dulces típicos.
Al margen de las visitas guiadas organizadas por el Patronato o el Ayuntamiento, la Oficina Municipal de Turismo también ha registrado durante el puente un goteo constante de turistas que recurren a la vía tradicional para recabar información sobre qué ver y qué hacer en la ciudad.
Además, muchos niños se han acercado al servicio municipal para solicitar el plano del juego interactivo “Marco Topo” que permite completar un recorrido por el patrimonio de la ciudad de una forma amena y divertida, en la que se implican activamente los más pequeños.
La decidida apuesta del Ayuntamiento por el turismo como pilar de desarrollo no se limita exclusivamente a un ingente esfuerzo por mantener abiertos los monumentos, tanto eclesiásticos como municipales, y para 2022 ya trabaja en la II edición de la exposición “La Iberoamericana” que, este año, ha suscitado el interés de unas 30.000 personas o en los distintos festivales, que han convertido a Toro en la “Ciudad de la Música”.
A ambos atractivos hay que sumar la variada agenda cultural que la ciudad volverá a desplegar el próximo año, con el objetivo de atraer a más visitantes y de que puedan disfrutar de una experiencia completa y repleta de vivencias.
