Toro ayer se tiñó de ilusión, fuerza y coraje. Casi un centenar de mujeres diagnosticadas de cáncer de mama se reunieron en la ciudad del vino, que por unas horas cambió el tinto por el rosa.
Esta jornada supone la primera toma de contacto para las mujeres tras la pandemia, que por motivos sanitarios ha pasado de ser regional a provincial.
El objetivo de este año es “reunirlas, que se vuelvan a ver”, relata María Hernández, responsable de la asociación AECC en Toro. Las participantes establecen un vínculo, detenido a causa de la pandemia, que ayer retomaron “coinciden en tratamiento y salas de consulta, vuelven a reencontrarse”, estas jornadas suponen una vuelta “a la vida normal”.
Esta cita había sido dedicada tradicionalmente a la divulgación, contaba con ponencias sobre avances en investigación y tratamientos y hábitos saludables, entre otros, “para eso es para lo que sirve este día”, recuerda Hernández sobre el origen de la cita. Sin embargo, esta es una ocasión extraordinaria “este año es lúdico”, aclara. Una primera toma de contacto para “retomar las actividades” poco a poco que han dado inicio con una recepción por parte del alcalde Tomás del Bien, José Luis Prieto Calderón, vicepresidente de la Diputación de Zamora y Alejandro González concejal de la corporación municipal. Luego, una visita guiada por la ciudad de la mano del alcalde con parada en La Colegiata, el Museo del Monasterio Sancti Spiritu, la plaza de toros y la bodega del consejo regulador. Todo un día para celebrar la vuelta a la normalidad teñida de rosa.
