Toro clausuró el martes la Vendimia con la que ha recobrado el pulso festivo, tras una exitosa edición que ha congregado a miles de personas en sus calles.

El mercado medieval y los espectáculos de calle ambientaron la última jornada festiva en Toro que, desde el pasado jueves, ha rendido su particular homenaje a los viticultores y bodegas de la Denominación de Origen, con un amplio programa de eventos culturales y lúdicos.

Durante seis intensos días de fiesta, los toresanos y visitantes han podido disfrutar del pregón inaugural de la Vendimia, a cargo del artista toresano Jesús Pinilla, cuatro conciertos de música tradicional organizados en el marco del I Festival “Zarandafolk”, el mercado medieval instalado en varias calles y plazas de la ciudad, el certamen de pintura rápida o dos catas de vino, una más técnica y otra popular, además de los talleres de elaboración de cócteles con tintos de la Denominación de Origen Toro.

Además de permitir a la ciudad recobrar el pulso festivo, la Vendimia se ha consolidado como un reclamo turístico de primer orden, aunque en la edición recién clausurada el Ayuntamiento decidió suprimir el acto central, el desfile de carros engalanados a la antigua usanza, para evitar mayores aglomeraciones y, tras valorar, que en pasados años el citado desfile ha congregado en Toro a más de 30.000 personas.

Tras el éxito de la Vendimia, la ciudad se preparará para celebrar otras fiestas como la Navidad y los esperados carnavales que, esta año, tuvieron que cancelarse por la pandemia del COVID.