Toro ha clausurado la primera edición de la exposición “La Iberoamericana”, un ambicioso proyecto cultural que tendrá continuidad en el verano del 2022, con una segunda edición que se desarrollará con idéntico objetivo: reivindicar y reconocer el papel de la mujer en el mundo del arte, en el que persiste la desigualdad.

Aunque la muestra de arte contemporáneo no cerrará sus puertas a los visitantes hasta el miércoles 15 de septiembre, el salón de plenos del Ayuntamiento de Toro acogió el viernes el acto oficial de clausura, durante el que se entregaron dos premios a las artistas Teresa Gancedo y Marina Vargas.

A la espera de realizar un recuento final de las visitas que ha recibido la muestra de arte contemporáneo, una vez que cierre sus puertas el miércoles, el alcalde de Toro, Tomás del Bien, destacó que, por las cinco sedes en las que se exhiben más de 150 obras de una treintena de artistas de España y del país invitado, México, “han pasado miles de personas” y que, en los últimos días de apertura, se espera un “aluvión” de visitantes.

Por este motivo, el Ayuntamiento reforzará las visitas guiadas programadas para los días en los que todavía permanecerá abierta la exposición, con el fin de que más personas puedan descubrir las piezas que conforman la colección.

Destacó Del Bien que el “resultado” de la primera edición de la exposición “nos da fuerzas para seguir adelante” y para seguir apostando por la cultura “como un elemento de desarrollo, de riqueza, de futuro y de cohesión social”.

Del Bien, junto a Víctor del Campo, presenta el balance de la exposición en su clausura M. J. C.

Por su parte, el comisario de la exposición, Víctor del Campo, destacó el ingente esfuerzo realizado por el “equipo humano” que se ha forjado en torno a la organización y el montaje de la muestra y que ha conseguido que “La Iberoamericana” se haya convertido en un referente en el mundo del arte, además de lograr una gran proyección de Toro a nivel nacional e internacional.

Para Del Campo, las expectativas iniciales del proyecto “se han cumplido” y, por este motivo, tendrá continuidad el próximo año en una nueva edición que seguirá apoyando a mujeres artistas para reconocer su papel en un sector en el que, a pesar de que se han producido avances, persiste el problema de la desigualdad.

Del Campo también calificó de “extraordinaria” la apuesta que Toro ha realizado por la cultura, no solo a través de las artes plásticas como ha quedado patente en “La Iberoamericana”, sino también a través de festivales musicales como el que este sábado se inaugura para recordar al director de orquesta, Jesús López Cobos.

En este sentido, subrayó que la cultura es un “elemento dinamizador” del medio rural y resaltó la capacidad de Toro para adaptarse e impulsar proyectos “vanguardistas” como “La Iberoamericana”, a pesar de ser una ciudad marcada por su pasado histórico del que se conserva un valioso patrimonio artístico.

El comisario de la exposición también agradeció el apoyo del obispado de Zamora y resaltó la repercusión que la celebración de la muestra ha tenido en el tejido productivo local, gracias a un “proyecto sostenible de economía circular” que, en su primera edición, “ha dejado el listón muy alto”.

Remarcó Del Campo que la primera edición de “La Iberoamericana” ha supuesto un “viaje fantástico” de dos meses y medio que ahora llega a su fin, pero que continuará el próximo año con una segunda edición en la que los promotores, el Ayuntamiento y el Gabinete de la Sociedad de Amigos del Arte, contarán con nuevas artistas a las que ofrecerán la posibilidad de exhibir su trabajo creativo en Toro.

Marina Vargas (izquierda) y Teresa Gancedo muestran el premio recibido en la clausura de la muestra M. J. C.

Un jurado integrado por profesionales del sector ha sido el encargado de elegir a la artista ganadora del “Premio de Honor La Iberoamericana-Delhy Tejero”, que en su primera edición ha recaído en la leonesa Teresa Gancedo. En la entrega del galardón, la artista alabó la belleza de Toro, una ciudad que no había visitado nunca y que llegó a calificar como “la más bonita de España”.

Además, ensalzó la exposición “La Iberoamericana”, que tildó de “maravillosa” y deseó que tenga continuidad en el tiempo y que “si está dedicada a la mujer, mucho mejor”. Gancedo participará en la segunda edición de “La Iberoamericana” como artista invitada y sus obras se exhibirán un “pabellón especial”.

Visiblemente emocionada, la artista granadina Marina Vargas recogió el Premio Popular, concedido mediante la suma de los votos emitidos por los visitantes que, desde su inauguración, han recorrido la exposición.

Vargas resaltó la importancia de una muestra como la celebrada en Toro porque sirve para dar visibilidad a las mujeres artistas en el medio rural, gracias a un proyecto que se aleja de los “cubos blancos”, en alusión a las galerías de arte.

El proyecto desarrollado en Toro, según Vargas, permite a las artistas exhibir sus obras en otros espacios distintos a las galerías de arte de grandes capitales, alcanzado así su objetivo de “generar pensamiento y discurso” a través de su trabajo.

Por último, abogó por defender la cultura, porque “es la mejor arma de transformación que tenemos” y reconoció el esfuerzo realizado por el Ayuntamiento de Toro por “protegerla”, especialmente en un momento complicado por el impacto de la pandemia en el sector.