Una mujer avisó ayer a la Guardia Civil tras encontrar dos granadas de mano antiguas escondidas en una vivienda propiedad de su familia, en Morales de Toro.

La Benemérita activó el protocolo de seguridad contra artefactos explosivos y desplazó componentes de Seguridad Ciudadana desde el puesto de Toro para asegurar el lugar, y miembros del Equipo de Búsqueda y Localización de la Comandancia de Zamora.

Estos especialistas certificaron que se trataba de dos granadas de mano italianas de la época de la Guerra Civil, denominadas OTO y BREDA, ambas del modelo 35. Se encontraban en buen estado y con todos los elementos de fuego: el detonador y la carga iniciadora, pasadores de seguridad, carga explosiva, percutores), por lo que podían ser muy peligrosas.

Por ello, se requirió la presencia del Grupo de Especialistas en Desactivación de Artefactos Explosivos de la Guardia Civil (Grupo GEDEX) para llevar a cabo la destrucción controlada de las granadas.

Todo este tipo de artefactos hallados casualmente pueden resultar muy peligrosos si se manipulan, la Guardia Civil aconseja no tocarlos nunca, señalar el lugar de la aparición para poderlo reconocer posteriormente y avisar a los Cuerpos y Fuerzas de Seguridad del Estado para su posterior recogida y destrucción. Si aparecen en un domicilio, en ningún aso se debe transportar el objeto o abandonarlo en otro lugar, solo avisar y esperar la actuación de los especialistas.

"No nos podemos fiar del aspecto físico de estos artefactos que a pesar de parecer deteriorados, obsoletos e inofensivos, pueden estar activos y causar graves daños en la persona que los manipule", advierten desde el instituto armado.