La Denominación de Origen Toro ha obtenido la acreditación de la Entidad Nacional de Acreditación (ENAC), que convierte al Consejo Regulador en una entidad con capacidad para certificar la elaboración de vinos según la norma internacional de calidad UNE-EN ISO 17065.

De esta manera, el órgano vinícola se convierte en entidad certificadora con plena capacidad para evaluar los vinos que se elaboran al amparo de la Denominación de Origen y asegurar el cumplimiento de su pliego de condiciones.

Responsables del ente regulador destacaron que la obtención del certificado de ENAC supone un “gran avance” que evidencia el firme compromiso de la Denominación de Origen y de sus elaboradores en el cumplimiento del sistema de calidad que aporta la citada distinción.

Además, la obtención del certificado refuerza el compromiso de la Denominación de Origen y de sus bodegas con sistemas de calidad internacionales que, además de suponer una garantía de confianza para los consumidores, permitirá agilizar la comercialización de los vinos de Toro.

Por otra parte, el Consejo Regulador recordó que la norma europea ISO 17065 especifica los criterios generales que debe seguir un organismo de certificación de productos para que sea reconocido como competente a nivel nacional, europeo e internacional y reconozca la fiabilidad de sus controles.

La acreditación representa una garantía sobre la seguridad y la calidad de los productos que se consumen, además de aportar un valor añadido dirigido a incrementar la confianza de los consumidores y que abre las puertas de los vinos de Toro a nivel internacional.

Por otra parte, el Consejo Regulador atribuyó el logro obtenido al trabajo y el esfuerzo realizado para adaptar los procedimientos, instrucciones técnicas y formularios al nuevo sistema de trabajo del órgano de control de la entidad, que se puso en marcha en la campaña 2019-2020 y que vela porque la calidad de los vinos de Toro esté asegurada, desde el viñedo hasta su comercialización en el mercado.