La delegación territorial de la Junta de Zamora ha adjudicado la redacción de un estudio técnico para obtener un diagnóstico sobre el estado real de conservación del Alcázar de Toro.

El reciente “colapso” de una bóveda de ladrillo en la crujía este ha propiciado que la Administración regional haya encargado la realización de un “levantamiento” detallado y un diagnóstico sobre el estado actual del monumento, con el objetivo de concretar sus deficiencias y las actuaciones que sería preciso ejecutar para garantizar su conservación.

El estudio ha sido adjudicado por un presupuesto de 2.843 euros y el plazo de ejecución es de seis meses.

El desplome de la bóveda en el local de ensayo de la Banda “Bendito Cristo de las Tres Caídas”, activó las alarmas sobre el deterioro del Alcázar y el Ayuntamiento instó a la Junta a evaluar otros problemas y a acometer una intervención urgente. De hecho, el Ayuntamiento constató otras deficiencias en el edificio como serios problemas de humedad.

El alcalde, Tomás del Bien, trasladó recientemente al Director General de Patrimonio de la Junta la necesidad de acometer una rehabilitación urgente en el Alcázar.

Además, en opinión del alcalde, el monumento requiere una intervención arqueológica importante y pendiente de realizar desde hace años y que serviría para arrojar más luz sobre su historia.

Aunque el Ayuntamiento tenía previsto llevar a cabo diversas mejoras, tras el desplome de la bóveda la intervención ha sido pospuesta, a la espera de conocer el origen de las humedades y otros problemas que presenta el inmueble.

El citado hundimiento también obligó a adoptar medidas de prevención para evitar incidentes y la Oficina de Turismo se trasladó al Ayuntamiento, aunque también fueron talados los árboles que se conservaban en el patio interior, porque sus raíces estaban ocasionando daños.

Restauración de un tramo de muralla en Tablarredonda

Al margen del proyecto de evaluación y diagnóstico sobre el estado real de conservación del Alcázar de Toro, la delegación territorial de la Junta también ha adjudicado recientemente la dirección facultativa para las obras del proyecto denominado “Restauración de la muralla de Toro en su tramo de la calle Tablarredonda 15”.

La citada actuación ha sido adjudicada por un total de 2.922 euros y el plazo de ejecución es de seis meses.

En este sentido, el procedimiento convocado por la Administración regional alude a que tras valorar que en la calle Tablarredonda de Toro se conserva un tramo de muralla que se encuentra en un deficiente estado de conservación, es preciso contratar las labores de dirección facultativa para llevar a cabo las obras de restauración que requieren los vestigios defensivos.

A lo largo de su historia, Toro ha contado con tres recintos amurallados, ya que a medida que crecía la ciudad era preciso ampliar y fortificar sus límites. Una vez consolidado el núcleo urbano se construyó la segunda muralla que protegió la ciudad tras la destrucción del recinto defensivo inicial. El tercer recinto amurallado aparece por primera vez en un plano de la ciudad, que data de principios del siglo XIX.