El Ayuntamiento de Toro ha aprobado el reglamento interno de control horario y de presencia del personal al servicio de la entidad, que servirá para establecer un nuevo sistema sobre la prestación del tiempo de trabajo y hacer efectivo el derecho reconocido de conciliación de la vida laboral y familiar, permitiendo más flexibilidad en el cumplimiento del tiempo dedicado al desempeño de las diferentes funciones encomendadas a funcionarios y laborales.

El nuevo reglamento interno ha sido aprobado en el último pleno del Ayuntamiento, durante el que la portavoz del equipo de Gobierno, Ángeles Medina, destacó que el control horario “es de obligado cumplimiento desde el año 2019” y que la única exigencia planteada es garantizar una atención directa al ciudadano, al menos desde las 9.00 hasta las 14.00 horas, aunque también se ofrece a la plantilla la posibilidad de completar el horario obligado de 37,5 horas semanales los martes por la tarde.

Remarcó Medina que con la implantación del nuevo sistema de control no se vulneran ni el Estatuto Básico del Empleado Público ni el convenio colectivo del Ayuntamiento de Toro vigente en la actualidad. En este sentido, anunció que, una vez aprobado con carácter definitivo el reglamento, se establecerán las normas para regular el funcionamiento del control horario, proceso en el que podrán participar los sindicatos representados en la mesa de negociación, aunque el primer mes de aplicación “será de prueba”. El grupo municipal Ciudadanos respaldó la aprobación del nuevo reglamento porque el sistema de control horario de los trabajadores se aplica desde hace años en instituciones públicas y empresas privadas y porque se adapta el teletrabajo. Del mismo modo, remarcó que su implantación, además de contribuir a mejorar el servicio que el Ayuntamiento presta a los ciudadanos puede ayudar a que “nadie se considere discriminado en cuanto a las horas que trabaja”.

Por su parte, el grupo municipal popular destacó que no era necesario aprobar un reglamento para implantar el control horario, ya que el Ayuntamiento se podría haber limitado a informar a la mesa de negociación sobre los procedimientos con los que pretende llevarlo a cabo. Además, el PP apuntó que el expediente sobre el nuevo reglamento “está incompleto”, ya que no incluye un informe de la técnico del departamento de personal, mientras que el emitido por el secretario “hace referencia a la forma pero no entra en el fondo del asunto”. Por este motivo, como matizaron los concejales de la oposición “no tenemos garantía jurídica” de que el reglamento “vaya en contra del convenio colectivo”. Por último, pusieron en duda que el reglamento contribuya a conciliar la vida familiar y laboral.