El presidente de la Diputación, Francisco Requejo, ha visitado este martes la residencia Virgen del Canto de Toro para comprobar el resultado de las obras de remodelación y adaptación que se han ejecutado en estancias de varias plantas del centro y también en los patios.

Destacó Requejo que las mejoras se han realizado con cargo a una subvención del Fondo COVID de la Junta y que la inversión se eleva a aproximadamente 160.000 euros.

Además, remarcó que las obras se han extendido a tres plantas del centro geriátrico, en las que se han llevado a cabo mejoras en suelos o puertas, aunque también se han remodelado los patios y se han adquirido ordenadores, tablets, camas abatibles o una lavadora.

Con las obras ejecutadas, como apuntó Requejo, la Diputación pretende ofrecer un servicio con “mejores condiciones” y poner en valor una residencia “segura y moderna”. Además, reconoció que, aunque la competencia del centro geriátrico corresponde a la Junta, ha sido asumida por la Diputación y, por tanto, tratará de que el servicio que se presta garantice el bienestar de los usuarios.

Requejo (segundo derecha) acompañado de los diputados y de trabajadores en un patio del centro M. J. C.

Requejo ha realizado un recorrido por las instalaciones de la residencia, acompañado por Ramiro Silva, diputado de Bienestar Social y José Luis Prieto, diputado de la zona de Toro.

En la visita también ha participado el director de la residencia, Ignacio Toranzo, quien explicó que, en la actualidad, el centro cuenta con 44 usuarios y que, de forma progresiva se irán incorporando nuevos residentes hasta cubrir las 70 plazas de las que dispone.

Por último, destacó que la residencia ha recuperado en parte la normalidad, tras la vacunación de usuarios y trabajadores frente al COVID, y que se han retomado las actividades y las visitas de los familiares.