Un año después de que el Juzgado de lo Penal de Zamora condenara al único investigado por la sustracción de un arco de piedra del patio del Siete en Condes de Requena, la pieza ha sido restituida al Ayuntamiento de Toro, que ha procedido a reubicarla en el mismo palacio de la que desapareció en 2014. En concreto, como apuntaron responsables municipales, el arco de medio punto de piedra ha sido colocado en el patio trasero de Condes de Requena, junto a la zarcera de la antigua bodega que se conserva en el palacio.

Para proceder al traslado ha sido preciso desmontar la pieza y numerar cada uno de los sillares para su correcta colocación. La restitución de la arcada y su colocación en el emplazamiento original pone fin a un largo proceso judicial iniciado en el año 2014, después de que el Ayuntamiento denunciara su desaparición del patio del Siete de Condes de Requena. Alumnos de una Escuela Taller crearon, entre los meses de diciembre de 1989 y 1991 la arcada de piedra que fue valorada pericialmente en 7.744 euros.

En la primera quincena del mes de enero de 2014 el arco, propiedad del Ayuntamiento, fue sustraído de Condes de Requena y, en junio del mismo año fue localizado por agentes de la Guardia Civil en el acceso a un patio interior de un establecimiento hostelero, propiedad del único investigado en un municipio de la comarca de Toro. La causa fue remitida al Juzgado de lo Penal de Zamora que señaló para el 14 de febrero de 2019 la celebración del juicio y seis días más tarde dictó sentencia absolutoria para el único investigado. No obstante, el 28 de junio la Audiencia Provincial de Zamora declaró la nulidad de la resolución y decretó la celebración de otro juicio para que la nueva sentencia fuera dictada por magistrado distinto, tras estimar el recurso de apelación interpuesto por el Ayuntamiento. Finalmente, el nuevo juicio se celebró el 20 de diciembre de 2019 y, en sala, prestaron declaración los agentes de la Guardia Civil que localizaron el arco, empleados municipales o una arquitecta que expuso que “con un altísimo porcentaje de acierto” la pieza hallada en un establecimiento hostelero era la misma que había sido sustraída del patio del Siete de Condes de Requena. Una vez finalizado el juicio, a las pocas semanas fue dictada una nueva sentencia, por la que se condenaba al investigado como autor de un delito contra el patrimonio de hurto, penado con doce meses de prisión, y al pago de las costas procesales. La resolución judicial también condenada al único investigado a restituir al Ayuntamiento el arco de piedra y a sufragar los gastos derivados de su transporte y posterior colocación en su lugar de origen, el histórico palacio de los Condes de Requena.