En los meses más duros de la pandemia, 23 agricultores de Toro demostraron su generosidad cuando, de forma voluntaria, decidieron compaginar su trabajo en el campo para abastecer a la población de productos de primera necesidad, con la desinfección de las calles con el objetivo de intentar frenar la propagación del COVID. En reconocimiento a su solidaridad, el Ayuntamiento ha entregado a cada uno de los agricultores que participaron en la campaña de desinfección un “detalle” en forma de lote de productos de la tierra, para que “lo compartan con sus familias” durante las fiestas de Navidad. El alcalde, Tomás del Bien, reconoció que, aunque el Ayuntamiento tenía previsto organizar un acto público de reconocimiento a los 23 agricultores, las actuales circunstancias sanitarias impiden su celebración, por lo que se ha optado por entregarles un obsequio para agradecerles una “labor impagable” que se prolongó durante varios fines de semana y en los meses de mayor incidencia de la pandemia en Toro. A pie y subidos a sus tractores, 23 agricultores recorrieron todos los rincones de la ciudad para intentar contener la propagación del COVID y, como precisó Del Bien, además de su valentía aportaron la maquinaria y el gasoil necesario para llevar a cabo los trabajos de desinfección y limpieza, sin esperar nada a cambio.

La campaña se desarrolló varios sábados y domingos, por lo que los agricultores también dedicaron su tiempo libre a intentar contener la pandemia, ya que el resto de la semana desarrollaron otro trabajo esencial, basado en abastecer de productos de primera necesidad a comercios y almacenes.

Varios labradores toresanos que participaron en la campaña de desinfección posan junto a sus tractores en la sede de los Bomberos. | Cedida

DESINFECCIÓN COORDINADA CON LA JUNTA AGROPECUARIA Y LOS BOMBEROS

Los agricultores llevaron a cabo la campaña de desinfección de la red viaria de forma coordinada con la junta agropecuaria local y con los bomberos, ya que en el Parque de Toro cargaban en cada salida sus tractores con la solución de agua y desinfectante que, posteriormente, esparcían por todas las calles y plazas. Los agricultores que colaboraron en la iniciativa se distribuyeron por zonas y barrios de la ciudad para que ningún punto quedara sin desinfectar e incluso cuando en Toro las cifras de contagios se redujeron notablemente ellos siguieron esparciendo desinfectante, gesto que emocionó y aportó seguridad a los toresanos.

En este punto, el alcalde reconoció que los 23 agricultores tan solo dejaron de esparcir desinfectante cuando las normas sanitarias desaconsejaron esta práctica al comenzar la desescalada y ante la presencia de ciudadanos y animales en las calles de la ciudad. A partir de entonces, como recordó Del Bien, los bomberos de Toro se han encargado de una desinfección centrada en zonas con más tránsito y otros espacios como los parques infantiles.

La generosidad de los agricultores ha sido reconocida por el Ayuntamiento con la entrega de un detalle, pero los toresanos guardarán para siempre en su corazón la imagen de 23 héroes que se afanaron durante semanas en intentar que el COVID no se propagara. Sin duda, el gesto solidario de los labradores forma parte ya de la historia de Toro y de su lucha frente a la pandemia para proteger la salud de sus vecinos.