Ante la próxima celebración de la fiesta de Todos los Santos, el Ayuntamiento de Toro ha establecido un protocolo especial de seguridad por el COVID, que se ajusta a la Orden emitida por la consejería de Sanidad de la Junta el pasado 14 de octubre sobre el control de aforo y acceso en los camposantos.

El alcalde, Tomás del Bien, ha plasmado en un bando municipal las normas de obligado cumplimento para todas aquellas personas que visiten en los próximos días el cementerio municipal para honrar a sus difuntos. En cuanto al aforo establecido, Del Bien explicó que se limita a un máximo de 300 personas garantizando el mantenimiento de la distancia interpersonal.

Las personas que visiten el cementerio deberán acceder por la puerta principal y la salida se realizará por la ubicada en la zona norte, junto al camino de Adalia. En el interior del recinto se establecerá un doble circuito por las calles principales, uno de ida y otro de vuelta, evitando el cruce de personas en direcciones opuestas, doble sentido que se limitará con una valla y se señalizará con carteles para procurar que todos los visitantes sigan el itinerario marcado.

Vecinos adecentan las sepulturas familiares en el camposanto municipal M. J. C.

Además, será obligatorio el uso de la mascarilla, respetar la distancia de al menos 1,50 metros y las medidas de higiene y protección. En diferentes puntos del cementerio se colocarán expendedores de gel hidroalcohólico, cuyo uso será obligatorio. El tiempo de estancia máxima en el recinto funerario será de una hora y se habilitarán dos zonas de aparcamiento en las inmediaciones de la puerta principal.

Para facilitar el cumplimiento de las normas, el cementerio permanecerá abierto desde las 9.00 hasta las 19.00 horas, de manera ininterrumpida, aunque los días 31 de octubre, 1 y 2 de noviembre, el recinto se abrirá una hora antes, a las 8.00. En todo momento los visitantes deberán seguir las indicaciones de los carteles que se situarán en lugares visibles, así como del personal del Ayuntamiento de Toro. Por seguridad, la capilla, la sala de espera y los aseos públicos permanecerán cerrados.

Las citadas medidas se aplicarán entre el 24 de octubre y el 8 de noviembre y su incumplimiento será motivo de expulsión del cementerio por parte de la Policía Local, Protección Civil y personal del Ayuntamiento.