La Coordinadora de Organizaciones de Agricultores y Ganaderos (COAG) ha denunciado coacciones a los viticultores para que firmen contratos de compra-venta de uva de vinificación con precios por debajo de costes, y asegura que los compradores están imponiendo cláusulas de manera abusiva, en las que obligan a reconocer costes de producción falsos.

Además, la organización agraria confirma que ya ha presentado ante la Agencia de Información y Control Alimentarios (AICA) varios ejemplos de contratos que incumplen la Ley de Cadena Alimentaria.

Para COAG, detrás de este tipo de prácticas irregulares se esconde una “feroz guerra de precios” para ganar cuota de mercado en el lineal del supermercado ante la caída del consumo de vino en bares, hoteles y restaurantes. “Es intolerable. Los grandes industrias y bodegas pretenden que los viticultores financien su nueva estrategia comercial por el COVID-19. Los datos reales de existencias, cosecha mundial y exportación no justifican una reducción del 30%en el precio de la uva, tal y como recogen las tablillas en las principales zonas de producción, como Castilla-La Mancha”, asegura que la organización en un comunicado recogido por Ical.