Desde primera hora de la mañana, los toresanos han participado en las misas oficiadas en honor a la Virgen del Canto, patrona de Toro y su alfoz aunque este año, por la pandemia del COVID, la fiesta se ha tenido que limitar al ámbito religioso y a un concierto de la Banda de Música La Lira. Los toresanos no han podido este año lucir sus capas y trajes tradicionales en el desfile que recorría las angostas calles del casco histórico hasta la ermita que custodia la venerada imagen, ni participar en la emotiva ofrenda floral, actos que han sido suprimidos para minimizar el riesgo de contagio y para evitar aglomeraciones en el templo.

La algarabía y la hermandad que caracterizan a la fiesta de la Patrona han quedado este año relegadas a un segundo plano en el que, por responsabilidad, los toresanos y vecinos de otros pueblos del alfoz han podido renovar su devoción a la Virgen del Canto, de una forma más íntima, durante las misas oficiadas en la ermita desde las 8.00 horas.

Un joven hace sonar las campanas de la ermita para anunciar la misa solemne de fiesta M. J. C.

El repique de campanas ha anunciado, pocos minutos antes de las 12.30 horas, la celebración de la solmene eucaristía en honor de la Patrona con estrictas medidas de seguridad y limitación de aforo en el interior de la ermita. Policía Local y Protección Civil han controlado el acceso de los devotos al templo para evitar aglomeraciones y, en el interior, se han congregado autoridades, responsables de la cofradía y corte de la Virgen del Canto, mayordomos y vecinos que, con fervor, han seguido la misa concelabrada por cinco párrocos. Por la reducción del aforo, otros vecinos han seguido desde el exterior del templo la eucaristía en la que también han participado miembros del coro interparroquial de Toro.

Devotos de la Virgen del Canto siguen desde el exterior de la ermita la misa de fiesta M. J. C.

 La cofradía y la corte de la Virgen del Canto, en colaboración con los párrocos de la ciudad, decidieron este año suprimir algunos de los actos centrales de la fiesta por el temor a posibles brotes de COVID, aunque acordaron mantener los de carácter religioso para que los toresanos pudieran reencontrarse con la venerada imagen y renovar su fervor. Además, decidieron que la tradicional ofrenda floral fuera sustituida por la recogida de un donativo voluntario, dinero que será destinado al Fondo Diocesano creado para luchar contra el COVID y ayudar a las personas más afectadas por la crisis sanitaria y económica.

Los mayordomos, autoridades y vecinos esperan el inicio de la misa solemne M. J. C.

Autoridades locales y vecinos han deseado, a través de las redes sociales, un feliz día de la Patrona y han implorado su protección y que preserve su salud para que el próximo año la ciudad pueda recuperar una fiesta muy arraigada en el corazón de los toresanos. La fiesta proseguirá por la tarde, a las 19.30 horas, con el rosario, novena y canto del himno a la Virgen del Canto en la ermita. Una hora más tarde, en la plaza de toros, la Banda de Música La Lira ofrecerá el tradicional concierto en honor de la Patrona de Toro y su alfoz.