La Asociación Española Contra el Cáncer (AECC) es una organización sin ánimo de lucro formada por pacientes, familiares, voluntarios, colaboradores y profesionales. En la localidad zamorana de Toro, María Hernández preside esta asociación desde 2017. Tras el confinamiento, la sede ha vuelto a abrir sus puertas con el objetivo de seguir velando y trabajando por la lucha contra la enfermedad del cáncer.

—Durante el estado de alarma, la sede de la AECC de Toro ha permanecido cerrada. ¿Cómo ha sido el confinamiento para los enfermos y para la asociación?

—Lo único que ha cambiado para los enfermos de cáncer es que no hemos hecho ningún taller presencial, pero el resto de las actividades y funciones se han seguido ejecutando de manera telemática. La trabajadora de aquí de Toro ha teletrabajado y los psicólogos de la asociación también. Han estado en permanente contacto con los pacientes, lo único que ha variado es que estos no han venido a realizar los talleres a la sede. Por lo demás, todo ha funcionado de manera correcta y sin ningún tipo de incidencia. El trabajo de toda la asociación durante estos meses ha sido de diez.

—¿Qué servicios ha prestado la asociación de cara al cuidado y a la ayuda a los enfermos de cáncer?

—Los servicios que hemos prestado durante este confinamiento han sido todos telemáticos. Entre ellos, la atención psicológica y social, la orientación sanitaria o la prevención y la información acerca de esta enfermedad. Todos estos obviamente de manera telemática. Además, la AECC amplío los servicios y los psicólogos pertenecientes a la asociación también han atendido a aquellas personas enfermas de coronavirus. Aunque no hayan sido enfermos de cáncer, la AECC quiso poner su granito de arena y ayudar en todo lo posible.

—¿Cree que este confinamiento ha dejado secuelas en los enfermos?

—Sí. En este sentido, el enfermo de cáncer es un poco “diferente”. La inmensa mayoría de los pacientes de cáncer están recibiendo tratamiento o son pacientes inmunodeprimidos. Por lo tanto, tienen que cuidarse mucho más que la mayoría porque son enfermos especialmente sensibles. El no poder salir a la calle, el no poder venir a hacer sus talleres, el yoga que les ayuda muchísimo, u otros talleres de contacto, pues yo creo que lo han notado mucho y lo han pasado realmente mal porque también han estado como un poco más aislados que el resto.

—¿Y el personal de la asociación? ¿Cómo ha sido para ellos el trabajar de manera telemática?

—Pues ha sido complicado, pero como la inmensa mayoría del personal ha podido seguir trabajando de manera telemática, todo este tiempo les ha servido también para formarse y para aprender a trabajar de otra forma. Es cierto que la AECC es una organización que fomenta mucho el contacto entre las personas, pero la situación se dio de la manera que se dio y la verdad que todo el personal de la asociación ha hecho un trabajo excepcional, ya que no han dejado de contactar con los pacientes.

—Pensando en el futuro, ¿qué otros proyectos se plantea la asociación?

Para este 2020 está todo suspendido. Hemos tomado la decisión de suspender todos los actos y eventos que teníamos programados para este año debido al coronavirus. Desde la AECC nos nutrimos de realizar actos y eventos para la obtención de recursos, pero este año no podremos hacer nada debido a la situación por la que estamos pasando. Sin duda, se trata de una parte importante con la que no vamos a poder contar, pero esperemos que el próximo año todo esto haya pasado o se haya suavizado y podamos realizar los eventos y actos que teníamos programados. Al igual que estos eventos, los talleres presenciales como, por el ejemplo, el yoga, también están suspendidos hasta nueva orden.

—Asumió el cargo de la presidencia de la AECC de Toro en el 2017, aunque ya colaboraba como socia durante años atrás. ¿Qué le hizo asumir este reto?

—En todas las casas suele haber un caso. En la mía, hubo varios, y por parte de la AECC nos ayudaron muchísimo y nos dieron un trato excepcional. Yo ya colaboraba como socia durante años atrás, pero un poco esta experiencia personal mía me hizo lanzarme a asumir el reto de la presidencia y la verdad que es algo que conlleva mucho sacrificio y esfuerzo pero que es muy gratificante. Yo trabajé mucho con el anterior presidente provincial, él me lo pidió, le dije que sí y me embarqué en este proyecto que, ya te digo, me apasiona.

—¿Qué supone para usted esta asociación?

—Me parece una asociación que presta un servicio muy importante. Tanto el paciente de cáncer como las familias necesitan ayuda y esta asociación se la da y les apoya. A los familiares les damos ayuda psicológica y también pueden participar en los talleres. Bajo mi punto de vista, creo que esta asociación hace un papel extraordinario ya que presta toda su atención y ayuda a estos enfermos de cáncer y sus familias. Además, se trata de una asociación en la que no es necesario ser socio para recibir ayuda. Si contactas con nosotros, aunque no seas socio, te ayudaremos y apoyaremos en lo que haga falta.

—Como presidenta de la asociación en la localidad de Toro, ¿cómo ve la respuesta por parte de los cermeños cada vez que se realiza un acto o un evento?

—Cada vez que hacemos un acto o un evento, la sociedad toresana siempre nos acompaña. En el desfile infantil, este año suspendido debido al COVID-19, siempre colaboran con nosotros y llenamos el teatro. Yo creo que responden bastante bien. Además, contamos con varios donantes anónimos de la localidad que acuden a la oficina a realizar su donación. La ciudad de Toro se vuelca con nosotros y la verdad que estamos muy agradecidos. También contamos con bastantes representantes por toda la comarca que nos ayudan a realizar eventos por los distintos pueblos cercanos a Toro, los cuales también responden muy bien.

—¿Se deberían destinar más recursos a la investigación para tratar de acabar con el cáncer?

—La AECC es la organización que más destina a investigación, pero las instituciones creo que deberían de prestar más ayuda. En mi opinión, todo depende de la investigación. Si avanzamos en investigación y tratamientos, avanzaremos en paliar y tratar de erradicar esta enfermedad que es el cáncer.