Las iglesias conventuales y las parroquias de las localidades integradas en la Unidad de Acción Pastoral-Morales reanudarán desde hoy el culto, aunque también se flexibilizan las restricciones impuestas para los funerales. Los párrocos confirmaron que el culto se recupera a partir de hoy, conforme a los días y horarios establecidos, salvo las misas dominicales sobre las que informarán debidamente.

El aforo máximo permitido será de un tercio y los asistentes a la eucaristía deben ocupar los lugares de los bancos señalados con el símbolo creado por los párrocos.

Los feligreses deberán utilizar mascarillas y lavarse las manos con geles hidroalcohólicos, aunque también tendrán que acatar otras normas adaptadas a la actual situación, tales como la supresión del gesto de la paz.

Para los funerales se procederá primero a la inhumación en el cementerio con el número de personas que permita la ley y, a continuación, será oficiada una eucaristía para un aforo limitado a un tercio. En Toro, la misa de funeral se celebrará en la capilla del cementerio. Por otra parte, una empresa especializada desinfectará mañana las parroquias de Toro y las iglesias-museo.