El proyecto realizado por el Instituto Tecnológico de Castilla y León (Itacyl) sobre la reconcentración parcelaria de la zona regable que abarca el canal de San José plantea las soluciones que es preciso adoptar para modernizar la infraestructura, garantizar el riego y ahorrar agua o energía, lo que permitirá a los agricultores afrontar con garantías campañas marcadas por la sequía y la limitación de los recursos hídricos. Así, la modernización del regadío proyectada consistirá en la sustitución del sistema de riego por gravedad a través de acequias por otro a presión mediante tuberías, que permita la implantación de infraestructuras para el riego por aspersión en las parcelas de los agricultores. Aunque el estudio revela que se están barajando diferentes alternativas para optimizar el funcionamiento del nuevo sistema, inicialmente plantea una modernización del regadío dividida en tres sectores independientes, desde el punto de vista hidráulico.

El primer sector abarca una superficie de 1.154 hectáreas enclavadas en Zamora y Villaralbo y la alternativa propuesta se basa en la impulsión directa a la red desde un azud existente en el río Duero en Villaralbo. Para el segundo sector, el estudio formula como alternativa más viable un bombeo conectado a una balsa de acumulación elevada desde el Duero que permitiría suministrar agua a una superficie de 847 hectáreas que se extiende por Villalazán y parte de Toro. La solución propuesta para el tercer sector es similar, ya que se basa en un bombeo conectado a una balsa de acumulación elevada desde el río, en una zona de retención de agua provocada por el azud de Tímulos en Toro. En este caso, la superficie afectada se extiende por 2.330 hectáreas que abarcan parcelas ubicadas en Peleagonzalo y Toro, así como en los municipios vallisoletanos de Villafranca del Duero y Castronuño.

Por otra parte, el estudio técnico resalta que las balsas de acumulación que está previsto adecuar en dos de los tres sectores servirán para que la comunidad disponga de una reserva de agua que permita regar a lo largo de todo el día, aunque el bombeo funcione las ocho horas en las que el precio de la energía es más reducido. Del mismo modo, el proyecto alude a la necesidad de instalar una línea y una subestación transformadora para garantizar el suministro eléctrico a las estaciones de bombeo y a la adecuación de una red de riego con tubería a presión enterrada, que partirá de las citadas estaciones. El trazado de la red se realizará en la medida de lo posible de forma paralela a los caminos proyectados en el marco de la reconcentración parcelaria. La estructura ramificada partirá de las redes principales de tuberías de las que surgirán las secundarias que llegarán hasta los hidrantes de riego, desde los que el agua pasará, a través de canalizaciones terciarias, a tomas que se implantarán en cada parcela.

La modernización del canal de San José lleva aparejadas diversas ventajas respecto al sistema actual, tales como un ahorro de agua, al evitar pérdidas por fugas de las actuales acequias, o el incremento de la eficiencia y mejora en el aprovechamiento de los recursos hídricos. Igualmente, conllevará un ahorro económico en energía al emplearse electricidad en lugar de gasoil y una mayor flexibilidad para adaptar el agua disponible a las exigencias de cada cultivo, así como la mejora de las condiciones de trabajo de los usuarios mediante la automatización y programación de los períodos de riego.