El Ayuntamiento de Toro ha recepcionado las obras incluidas en el proyecto denominado "Rehabilitación y reposición de firmes en diferentes zonas de la ciudad", trabajos ejecutados en las últimas semanas y que han sido sufragados con la subvención de 282.940 euros concedida por la Diputación de Zamora. El resultado de las actuaciones ejecutadas e incluidas en el proyecto fue supervisado ayer por un ingeniero de la institución provincial que, tras recorrer las calles en las que se ha intervenido, emitirá un informe sobre las obras que el Ayuntamiento ya ha recepcionado y que además de mejorar la pavimentación de vías que presentaban un notable deterioro, también han permitido reordenar algunas zonas de estacionamiento de vehículos e incrementar la seguridad vial en el paseo del Canto o en un tramo urbano de la travesía de la N-122. En concreto, el proyecto impulsado por el Ayuntamiento ha servido para mejorar tres tramos de la carretera N-122 a su paso por la ciudad, en los que sobre el firme existente se ha extendido una mezcla bituminosa en caliente, aunque también se ha mejorado la señalización horizontal mediante marcas viales y los registros y rejillas se han acondicionado al nivel de la nueva rasante.

En el tramo urbano de la N-122 han sido ampliadas las rotondas de acceso a Toro desde la cuesta de los Pinos, rotondas que han ampliado su diámetro y que han sido dotadas de encintado de bordillo, con el objetivo de incrementar la seguridad vial en la zona. Con la modificación de las rotondas, el Ayuntamiento ha atendido la demanda de peatones y conductores porque las provisionales que existían anteriormente y que habían sido señalizadas con pivotes habían generado algunos incidentes.

Al margen de la actuación ejecutada en un tramo urbano de la N-122, también ha sido renovado el pavimento del acceso al polígono industrial norte, en el que existían baches de grandes dimensiones. El proyecto ejecutado también ha permitido renovar el firme del camino del cementerio y, en el paseo del Canto, en el que el pavimento presentaba un notable deterioro, al margen del nuevo asfaltado se ha prolongado la acera peatonal con encintado de bordillo y pavimento de hormigón en masa, entre otras actuaciones.

En la plaza de San Francisco y en la Rúa de Santa Catalina, además de pavimentar ambas vías, la ejecución del proyecto también ha servido para reordenar las zonas de estacionamiento, plazas que han sido delimitadas con una señalización horizontal, aunque en ambas calles el Ayuntamiento tiene previsto, en un futuro, ampliar algunas aceras que, por su estrechez, dificultan el tránsito seguro de los peatones. En la avenida de Tagarabuena y en la margen izquierda de la carretera CL-705 las obras ejecutadas han permitido renovar la pavimentación con hormigón en masa armado con mallazo y adecuar pendientes y peraltes que faciliten la evacuación del agua. Con la subvención otorgada por la Diputación también se han llevado a cabo actuaciones en otras calles de Toro como Vicente González, Victoriana Villachica y Hernán Juan, en las que se ejecutado labores de fresado previo en un espesor de tres centímetros del pavimento y posteriormente se ha realizado una reposición con mezcla bituminosa, aunque también han sido dotadas de una señalización horizontal mediante marcas viales.