La Asociación Corriendo con el Corazón por Hugo es una agrupación que se constituyó en el 2017, y cuyo fin es "intentar mejorar la calidad de vida de las personas con Enfermedades Raras, sus familias y cuidadores". Las enfermedades denominadas raras, según define Nando Domínguez, uno de los voluntarios de la asociación en Toro, además de ser a uno a los que ayudan, "son las que no tienen constancia de cuantas personas la padecen, o que no tienen mucha investigación", informa. La definición se complementa con la que da la Federación Española de Enfermedades Raras (FEDER): "una enfermedad es considerada rara cuando afecta a un número limitado de la población total, definido en Europa como menos de 1 por cada 2.000 ciudadanos".

En Toro tienen dos miembros: Loli Carreras y Nando Domínguez. Carreras cuenta que iban a hacer una recaudación de fondos para intentar conseguir dinero para la operación de Nando, pero, como la asociación contactó con él esa idea la decidieron utilizar para colaborar con la asociación. La iniciativa se basa en una recaudación de fondos a través de la venta de libros por distintos pueblos de alrededor de Zamora y Valladolid. "En Toro queremos hacerlo por lo menos una o dos veces al mes", afirma Carreras.

La idea es montar un puesto con libros de segunda mano que les han donado diversas personas, y venderlos al resto de los ciudadanos. Además de los libros, los dos miembros cuando pongan su puesto en la localidad toresana quieren hacer folletos de carácter informativo para informar a la población de quienes son, qué finalidad tiene la asociación e intentar conseguir que más gente se una."We love Hugo" presenta una serie de objetivos, como: contribuir a promover actividades hacia el colectivo afectado; mejorar la integración social; fomentar el desarrollo educativo; o contribuir al estado de bienestar de la persona que padezca la enfermedad rara, entre otras.

La Asociación según informa Domínguez también ha mandado dinero fuera de España para la investigación de una enfermedad. Es el caso de Catherine, una niña zamorana de seis años. La corporación envió 1.300 euros a la Universidad estadounidense de Connecticut para avanzar en la investigación sobre la glucogénesis tipo 1B, único sitio en el mundo donde se estudia esa enfermedad.

El caso de Domínguez, como ya ha salido en otras ocasiones en este periódico, comenzó a través de un micromezenazgo a través de la red social Facebook. Desde ahí los medios de comunicación conocieron su caso y quisieron hacerle eco, hasta que la asociación lo conoció y decidió pagarle la operación. Aunque para él no es solamente eso, sino conseguir su sueño, poder ver bien, y, en pocos días lo habrá conseguido.