Aunque nació en Madrid, el director y productor de cine, Juan Pablo Martín Rosete, mantiene estrechos vínculos familiares con Toro, ciudad en la que pasó muchos veranos durante su infancia y juventud. Hace 12 años fijó su residencia en Estados Unidos, gracias a una beca que le concedió La Caixa. En 2011 dirigió "Voice Over", trabajo con el que fue nominado a los Goya y recibió el Méliès d'Or al mejor cortometraje fantástico europeo. En 2016, debutó como director de largometrajes con "Money", un thriller rodado en Estados Unidos. En agosto estrenó su segunda película, "Remember Me".

-Aunque reside en Estados Unidos, ¿qué vínculos mantiene con Toro?

-Mi familia es de Toro y pasé muchos veranos cuando era pequeño en Toro. Hace 12 años, La Caixa me concedió una beca y me fui a vivir a Nueva York, aunque cuando vuelvo a España intento visitar Toro. A esta ciudad me unen los recuerdos de cuando era pequeño y volvía en verano para estar con mis abuelos, padres, primos y tíos. Recuerdo cuando bajábamos al río a pescar o a los pinares a coger setas.

-Desde que era un niño, ¿tenía claro que quería ser director de cine?

-Cuando era niño me gustaba contar historias y quería estudiar periodismo. En 1995 o 1996 vi la película "Tesis" de Alejandro Amenábar y pensé que, si se pueden contar historias haciendo películas como "Tesis", quería probar. Además tenía claro que me gustaba el tipo de cine americano y por eso quería ir a formarme a Estados Unidos y trabajar allí.

-Hace 12 años decidió fijar su residencia en Estados Unidos para convertirse en director de cine, ¿alcanzar esa meta es más difícil en España?

-Mi idea era tener un pie en cada país. Vivir a medio camino entre los dos sitios es el objetivo. La industria del cine en Estados Unidos es más grande y hay más oportunidades, aunque en España también hay una forma de hacer cine más europea que también me interesa mucho. Ahora tengo varios proyectos en español para rodar en España y otros para rodar en Estados Unidos por lo que según vayan saliendo estaré rondado aquí o allí.

-Con uno de sus cortometrajes consiguió una nominación a los premios Goya, ¿es muy diferente rodar un largometraje?

-Para rodar un cortometraje vives de los favores y para rodar un largometraje hay que contar con la financiación para poder hacerlo. Es diferente, pero tu motivación y la que transmites al resto del equipo debe ser la misma. Hay que tener mucha pasión para contar una historia y, haya más o menos presupuesto, hay que trasladarla al equipo para que se sume al proyecto.

-Su última película, "Remember Me", ¿qué acogida está teniendo entre el público?

-La verdad es que estamos muy contentos. Hemos rodado la película que hemos querido, la hemos sacado ahora en cines en España y estamos a punto de firmar con una empresa americana para su distribución en 185 países. Hacemos películas con temas universales que rodamos, mayoritariamente en inglés, con el objetivo de que se puedan estrenar en España, pero que también nos las compren en el resto de países del mundo. Ese es el tipo de cine que me interesa.

-Desde que leyó el guión de "Remember Me", ¿tenía claro que quería dirigir la película?

-El guionista me contó en pocos minutos ocho o diez historias y, desde el principio, desde que leí el guión, supe que la historia de "Remember Me" era la que quería contar en mi segunda película, aunque sacar el proyecto adelante me ha costado cuatro años de trabajo.

-La película aborda una enfermedad como el Alzhéimer, ¿qué mensaje ha querido trasladar al público con su obra?

-La verdad es que hemos intentado no caer en los tópicos y que la película no fuera lacrimógena, aunque determinadas secuencias pueden generar alguna lagrimita. Queríamos abordar la enfermedad desde otro punto de vista más optimista y la gente que tenga la oportunidad de ver la película también va a sonreír. La película también aborda una historia de amor sesgada por diversos acontecimientos.

-¿Cómo ha conseguido contar para sus segunda película con actores de reconocido prestigio como Bruce Dern o Verónica Forqué, entre otros?

-Lo importante es contar con un buen guión. Si tienes un buen guión, aunque los actores tengan agentes y managers protegiéndoles, al final consigues que se sumen al proyecto. Logramos llegar a Bruce Dern que ha estado nominado dos veces a los Óscar o que ha ganado el premio en Cannes al mejor actor y es un profesional con muchísimo prestigio en Hollywood. Actrices muy reconocidas querían hacer la película solo porque estaba Bruce Dern y la verdad es que ha sido un gustazo trabajar con él.

-¿Qué ha aprendido de los actores con los que ha contado para su película?

-La primera semana fue un shock porque nunca había trabajado con alguien como Bruce Dern, que es pura improvisación y un alma libre. Con Bruce Dern he aprendido que tienes que acudir al rodaje con los deberes hechos, pero que también hay margen de maniobra y que si encuentras algo que puede mejorar la película no hay que tener miedo a probarlo.

-Al margen de su faceta como director, también trabaja como productor...

-Al igual que cuando yo empezaba me ayudó mucha gente, creo que ahora ha llegado el momento de ayudar a otras personas con talento y con ilusión para que puedan llevar a cabo sus planes. Tengo varios proyectos en curso, de los que algunos son para dirigir y otros para producir.

-¿Plataformas digitales como Netflix perjudican o benefician a la industria del cine?

-Considero que son oportunidades. En mi caso, con la primera película me salvó la vida que entrara Netflix porque facilitó que se viera en todo el mundo, a pesar de ser una película diminuta producida con nuestros ahorros. Es cierto que ahora están intentando copar la producción, pero son variaciones de negocio que van con las nuevas tecnologías. Quiero ver este tipo de plataformas como una oportunidad, nunca ha habido tantas oportunidades y tanto dinero inyectado en la industria del cine para financiar proyectos.

-¿Cuál es su próximo proyecto?

-La verdad es que no lo decido yo sino los inversores. Tengo un proyecto de una película de ciencia ficción que me interesa mucho y estamos intentando conseguir una coproducción entre Estados Unidos y España. Hay actores muy grandes en Estados Unidos interesados en el proyecto.