La tormenta de pedrisco registrada el pasado sábado en la localidad de Villaester (Valladolid) ha originado importantes daños en cerca de 300 hectáreas de viñedo amparadas por la Denominación de Origen del Vino de Toro. A la espera de que a lo largo de los próximos días peritos de las compañías aseguradoras evalúen las pérdidas provocadas por el granizo, viticultores afectados estiman que la superficie afectada es elevada, alrededor de 300 hectáreas que, en su mayoría, son propiedad de vecinos de Morales de Toro y de una bodega situada en el municipio vallisoletano de Pedrosa del Rey, al que pertenece la localidad de Villaester.

Pablo Domínguez, viticultor de Morales de Toro, es uno de los afectados por los daños que el pedrisco provocó el pasado sábado en sus viñedos de Villaester y que, en su caso, se extienden a unas seis hectáreas. Precisó Domínguez que la tormenta descargó cerca de 24 litros por metro cuadrado en pocos minutos y que el granizo era de "gran tamaño", lo que ha ocasionado daños importantes en muchas viñas, en las que estima que las pérdidas de muchos gajos pueden rondar entre un 20 o un 30%. El impacto del granizo, como reconoció el viticultor de Morales de Toro, "abre las uvas que toca" provocando que "se sequen", por lo que es preciso aplicar de inmediato un tratamiento en las vides para que el fruto "no se pudra más". Al margen de las pérdidas ocasionadas en viñedos de Villaester, el granizo lleva aparejadas otras consecuencias como la posible aparición de enfermedades como el oídio o el mildiu por la podredumbre de los racimos dañados. En concreto, enfermedades como el oídio, pueden generar la paralización del desarrollo del grano en plena fase de engorde, ocasionando su apertura y rotura, aunque también obliga a los viticultores a realizar unas podas más cortas para preservar, en la medida de lo posible, la sanidad de las cepas.

En principio, los daños ocasionados en racimos de viñas enclavadas en pagos de Villaester supondrán una merma de cosecha de uva que se recolectará en la zona, aunque el pedrisco de gran tamaño que descargó la tormenta también afectó a algunas parcelas cultivadas con cereal.

Por el momento, no hay constancia de que otras parcelas de viñedo amparadas por la Denominación de Origen Toro resultaran dañadas el pasado sábado por las tormentas registradas en la zona.