El Ayuntamiento remodelará la plaza de La Merced de Toro por los desprendimientos que se han detectado en el interior de la antigua capilla en la que, hace años, fueron hallados unos restos funerarios y para evitar posibles incidentes. Así lo ha confirmado la concejala de Obras, Ruth Martín, quien reconoció que los restos arqueológicos presentan un notable deterioro y que en el lugar en el que fueron hallados se han producido hundimientos que suponen un riesgo para los vehículos que circulan por la plaza. La Comisión Territorial de Patrimonio ha dado el visto bueno a la intervención prevista por el Ayuntamiento, proyecto que contempla la retirada del zócalo de piedra con el que fue señalizada la existencia de los restos arqueológicos, así como del crucero instalado sobre el cerramiento de placas con el que se cubrió la estancia del que se conserva la columna y que será devuelto a su propietaria, la Fundación González Allende.

Del mismo modo, como avanzó Martín, después de que los restos arqueológicos y los de la antigua capilla hayan sido revisados recientemente por técnicos de la Comisión Territorial de Patrimonio, finalmente ha sido aceptada la propuesta del Ayuntamiento que pasa por cegar la estancia para frenar los hundimientos detectados, aunque también se adecuará un forjado que se cubrirá con un solado para que los vehículos puedan circular sin riesgos por la plaza de la Merced. Aunque en un principio la concejalía de Obras había planteado la posibilidad de retirar el zócalo y dejar el acceso a los restos arqueológicos "a ras de suelo" para adecuar un acceso con una "tapa metálica" similar a la instalada en la entrada desde la calle a la bodega del Ayuntamiento, finalmente la idea ha sido desechada por los desprendimientos detectados en la estancia.

La propuesta aceptada por Patrimonio consistirá en retirar el zócalo y los planchones colocados sobre la estructura elevada, aunque se estudiará la posibilidad de marcar la zona en la que fueron hallados los restos funerarios con una pavimentación distinta e instalar unas placas explicativas en la zona con el fin de recordar que en ese lugar fueron encontrados vestigios de una antigua capilla funeraria.